La Assemblea Nacional Catalana (ANC) se ha convertido en un ambiente laboral hostil, con actitudes despóticas y machistas por parte de los directivos. Lo aseguran al menos tres personas, que han presentado denuncias y quejas internas en los últimos meses, que afectan principalmente al gerente, Miquel Pujadas.
Según publica El Confidencial, uno de los casos ha derivado en una denuncia judicial por acoso laboral. En otros, las trabajadores han tenido que coger una baja por estrés ante las condiciones de su trabajo.
Depresión y despido
Las víctimas denuncian la actitud prepotente y autoritaria del gerente y altos niveles de estrés derivados de una intensa carga de trabajo. Una de las afectadas, la exresponsable de márketing, cayó en una depresión de la que todavía no se ha recuperado.
El caso llegó supuestamente al conocimiento de la presidenta de la organización independentista, Elisenda Paluzie. El episodio concluyó con el despido de la trabajadora por causas objetivas.
Un logo pirateado
La responsable de comunicación también sufrió supuesto acoso por parte de Pujadas y fue recolocada para no depender de él jerárquicamente. Otra trabajadora, de administración, cogió la baja por la angustia que sufría y finalmente presentó la denuncia por acoso.
A este conflicto laboral se añade el del diseñador Xarli. Según el mismo digital, tras recibir un encargo de un logotipo y enviarlo, el creador se encontró con que no se lo pagaban alegando no tener dinero. Ahora, otra organización, el Front Comú Contra la Repressió, utiliza el mismo logo sin permiso.