La CUP ha convocado a su militancia para decidir sobre la suspensión de la presidenta del Parlament, Laura Borràs, si finalmente acaba siendo juzgada por la presunta asignación irregular de 18 contratos fragmentados a un amigo cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC).

Así lo ha avanzado el diputado de la CUP, Carles Riera, en una entrevista a Catalunya Informació, quien ha asegurado que tras escucharla y analizar el planteamiento de juicio oral "pondremos en marcha los procedimientos de debate y toma de decisiones necesarios para que nuestra militancia decida sobre un hecho muy trascendental”.

Insiste en su inocencia

Borràs podría verse afectada, si así lo dictamina la Comisión del Estatuto del Diputado. Según establece el artículo 25.4 del reglamento de la Cámara catalana, "en los casos en los que la acusación sea por delitos vinculados a la corrupción, la Mesa del Parlament, una vez que se abra juicio oral, debe acordar la suspensión de los derechos y deberes parlamentarios de forma inmediata".

La jefa de la cámara autonómica insiste en su inocencia y asegura ser víctima de una "persecución política". Algo con lo que también coincide la CUP, que defiende que el caso de la fragmentación de contratos podría ser una persecución política contra el independentismo. La decisión de los anticapitalistas podrá conocerse en los próximos días, cuando se abra el juicio por cuatro delitos de corrupción a la presidenta del Parlament.