La secretaria general del Parlament, Esther Andreu, ha retirado la dirección de los servicios jurídicos de la Cámara al letrado mayor, Miquel Palomares, y también la competencia de prestar asistencia y asesoramiento jurídico especializado en cuestiones relacionadas con las funciones de la Mesa y la Junta de Portavoces al exletrado mayor y actualmente letrado raso Antoni Bayona.
La decisión se produce después de que Andreu y Palomares discutieran en la reunión de la Mesa de ayer miércoles por el informe jurídico que debe analizar si se pueden retirar las licencias de edad --las polémicas retribuciones que permiten cobrar sin trabajar a personal del Parlament desde los 60 años hasta la jubilación-- a los funcionarios que ya las tienen.
Bayona, apartado
El Boletín Oficial del Parlamento de Cataluña (BOPC) publica este jueves la orden de Andreu de retirar a Palomares las funciones de dirección de los servicios jurídicos de la Cámara que le fueron delegadas con anterioridad, y también aparta a su antecesor Antoni Bayona de las tareas de asistencia y asesoramiento jurídico especializado a la Mesa y Junta de Portavoces.
El exletrado mayor del Parlament, Antoni Bayona / LENA PRIETO
Según ha adelantado el Diari Ara y han confirmado fuentes parlamentarias a EFE, esta resolución de la secretaria general llega después de un choque con Palomares.
Disputa
El origen de la disputa está en la elaboración del informe que el pasado 18 de enero la Mesa encargó a los letrados para saber si se pueden revocar las licencias de edad ya aprobadas antes de la supresión de este régimen especial, que permitía a mayores de 60 años percibir su sueldo íntegro sin ir a trabajar hasta la jubilación.
En un primer momento, el encargado de liderar ese informe es el letrado mayor, que empieza a redactar un documento que avala la posibilidad actuar con carácter retroactivo sobre la treintena de funcionarios que disponen de una licencia de edad; tanto sobre quienes las pidieron en los últimos meses y las tienen aprobadas pero inactivas, como sobre quienes gozan de este privilegio desde hace años.
No obstante, una parte de los servicios jurídicos de la Cámara catalana no comparten este punto de vista y Andreu decide encargar un informe alternativo a otro letrado, Ferran Domínguez.
Retroactividad cuestionada
Este segundo informe no avala de forma explícita la retirada de las licencias de edad ya concedidas y, según fuentes parlamentarias, pone el foco en las dificultades jurídicas de actuar con carácter retroactivo.
El conflicto entre la secretaria general y el letrado mayor por esta cuestión afloró durante la reunión de la Mesa del Parlament de ayer miércoles, después de que Domínguez registrara de forma oficial su informe, que no se incluyó en el orden del día.
Represalia
Cuando el secretario primero de la Mesa, el socialista Ferran Pedret, preguntó por qué no debatían un informe ya registrado fue cuando Palomares expuso su malestar con Andreu y explicó que le había relegado con el trabajo a medias.
Tras momentos de "tensión" y ante una evidente disparidad de opiniones entre los letrados, al final la Mesa del Parlament acordó que la semana que viene escuchará todas las observaciones de los servicios jurídicos.
Acusaciones mutuas
Esta decisión llega después de la polémica sobre las licencias por edad, por las que había trabajadores del Parlament que seguían cobrando sin trabajar, y tras la petición de Bayona de abrir una investigación sobre las "trabas de transparencia" a la hora de gestionar este caso. Andreu negó "rotundamente" las acusaciones de Bayona, a quien acusó de bloquear el órgano de transparencia, del que el letrado mayor forma parte.