Barcelona y su entorno necesitarán inversiones por valor de 2.400 millones de euros para asegurar que se cubre la demanda de consumo de agua en 2050. Esto es, en 28 años. El Área Metropolitana (AMB) ha elaborado un plan maestro que aporta estas cifras y da una solución: inversiones en la red, aunque la institución pública solo pagará el 54% de los trabajos que considera indispensables. 

Son las ideas clave del Plan Estratégico del Ciclo Integral del Agua (Pecia), una hoja de ruta para garantizar el suministro avanzada hoy por el vicepresidente del AMB, Eloi Badia. El plan parte de un diagnóstico: en 28 años, Barcelona y la conurbación necesitarán hasta 43.000 millones de litros de agua en situación de sequía, algo que la infraestructura actual no cubre. 

Racionalización

Ante esta alerta, desde el Área se propone un paquete de medidas para ahorrar agua de consumo doméstico y no doméstico. ¿Cuánto? Unos 23.700 millones de litros al año que procederán, en su mayoría, del esfuerzo del consumidor, pues hasta 8.000 litros se salvarán colocando masivamente aireadores en los grifos de los domicilios. En el mismo sentido, el AMB pide generalizar los "sistemas de recirculación" de agua caliente y mejorar el aprovechamiento de las aguas grises. 

Consumo de agua en un hogar de Cataluña, donde se acumulan sentencias contrarias a la concesión del servicio a Congiac / EP

Todo ello permitirá ahorrar los 23.700 millones citados. No obstante, se trata de una proyección que el equipo de Badia calcula para una "penetración media" de los sistemas que propone. 

Más recogida

El plan de la institución supramunicipal también contempla una mayor capacidad de recogida. Ello se logrará con tres inversiones en infraestructura. Se trata de una nueva planta potabilizadora (ETAP) en el ámbito del río Besòs, una nueva planta de regeneración del agua (ERA) en la misma área y la construcción de una cañería de agua reciclada desde este territorio al otro sistema de aguas que alimenta Barcelona: el de Llobregat. 

Con estas tres actuaciones, se podrían recoger hasta 38.000 litros más (38 hectómetros cúbicos) en 2050. No obstante, el propio Badia ha admitido que las obras no tienen ni presupuesto ni terreno. Dependerá de su inclusión en los planes de obras de la Agencia Catalana del Agua (ACA). El AMB se compromete solo a provisionar 132 millones del total de 740 millones en ampliación de las plantas y la red que ella misma exige. ¿El resto? "Estamos en conversaciones constantes con todas las administraciones", ha admitido el también concejal de Emergencia Climática de Barcelona. 

La pelota, al ACA y ayuntamientos

De este modo, del total de 2.400 millones en inversiones hasta 2050 que necesita la red de agua de Barcelona y cercanías, el AMB pagará solo el 54%: 1.300 millones de euros. El resto lo deberán poner la propia ACA, que depende de la Vicepresidencia de Territorio y Políticas Digitales, que dirige el conseller Jordi Puigneró (Junts), y los ayuntamientos. A este respecto, Eloi Badia ha detallado que los planes urbanísticos de los entes locales deben contemplar sistemas de reaprovechamiento de agua. 

El consejero de Políticas Digitales, Jordi Puigneró / YOUTUBE

Es lo que hace, ha dicho, el polémico proyecto de Superilla Barcelona, una intervención a gran escala en el Eixample de la Ciudad Condal que prevé expulsar los coches de hasta 33 calles. El plan, que impulsan las concejalías de Barcelona en Comú (BComú), partido de la alcaldesa Ada Colau, ha sido criticado por Foment del Treball y el RACC, entre otras instancias. 

La clave: falta agua

El paquete de medidas presentado hoy por el AMB bascula sobre la idea de que Barcelona y los otros 36 municipios del área metropolitana tienen agua suficiente, pero que no la tendrán a medida de que el cambio climático seque los acüíferos y provoque otros estragos en el sistema natural, según la Administración supralocal. En estos momentos y de forma anual, los recursos son de cerca de 800.000 litros al año, por una demanda de la mitad: unos 400.000 litros. 

En 2050, no obstante, esta situación cambiará. Según el área, la capital catalana y sus 35 localidades vecinas necesitarán entre 11.000 y 43.000 litros de agua más al año, según llueva mucho o poco. A este respecto, cabe recordar que el Govern ha declarado este año la prealerta por falta de lluvias en las regiones de Barcelona y Girona.