Sin sorpresas en la tradicional ofrenda floral navideña en homenaje al expresident Francesc Macià. El jefe del Gobierno catalán, Pere Aragonès, aprovechó el escenario y el discurso, aún muy reciente del rey Felipe VI para poner en valor la figura del mandatario republicano de los años 30 en contraste con el monarca, al que ha criticado por mantener un relato, en su opinión, vacío.
“Esperábamos muy poco y ha aportado muy poco”, ha apuntado Aragonès en el acto, en el que ha estado acompañado de varios miembros de su Ejecutivo como el vicepresidente, Jordi Puigneró y la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, además de Gemma Geis (Universidades), y Teresa Jordà (Acción Climática).
Justificar la independencia
En todo momento, Aragonès ha hecho hincapié en contraponer las figuras Macià y Felipe VI, en el sentido de que el primero “personifica claramente la causa de la libertad de Cataluña, el progreso y la justicia; es un ejemplo a seguir”.
En opinión del presidente de la Generalitat, este hecho genera un “contraste muy claro” entre la monarquía y la figura republicana que representaba Macià. “Por eso somos republicanos y defendemos la independencia como la mejor herramienta”, para alcanzar aquellos valores con los que ha relacionado a Macià.
El discurso de Macià
Al hablar de la independencia, Aragonès ha citado algunos fragmentos del discurso del expresidente republicano durante la solemne apertura del Parlament en 1932, un año después de la caída de la monarquía de Alfonso XIII y la proclamación de la II República.
En concreto, se ha referido a las expresiones “sin dar ningún paso en falso ni ningún paso atrás” como referente de lo que, a su juicio, debe ser la línea de actuación de la Generalitat.
El faro que necesita Cataluña
"Estas palabras nos tienen que guiar en estos momentos en que es evidente que la causa de la justicia social necesita la libertad nacional", ha apuntado en el acto.
Una línea muy similar a la que ha seguido la presidenta del Parlament, Laura Borràs, que también ha protagonizado un acto de homenaje a Macià junto a algunos miembros de la Mesa. Para la dirigente de JxCat, el antiguo presidente republicano debe ser “un faro, que es lo que necesitamos en Cataluña”.
"Aferrado a la Constitución"
En otros actos similares, las críticas al mensaje navideño de Felipe VI han sido una constante. Sin ir más lejos, el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha afeado al monarca su “renuncia a ser parte de la solución del conflicto catalán” y le ha acusado de no reconocer la diversidad.
Mientras, el líder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall, ha criticado que Felipe VI siga “aferrado a una Constitución que ya no dice nada a nadie”, al tiempo que ha calificado su discurso como “de cartón piedra”.
Defensa del catalán
Al mismo tiempo, ha aprovechado para alabar la labor de su partido al frente de la Generalitat con ejemplos como la aprobación de los Presupuestos y la defensa del catalán ante “los ataques por la retaguardia” a la inmersión lingüística.
“El presidente Macià estaría orgulloso de esta Cataluña que no solo gestiona y negocia", sino que también recupera dignidad, ha dicho.