El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha advertido este sábado de que "la confrontación entre partidos no lleva a ninguna parte" y que o bien "somos proactivos o entraremos en una situación de bloqueo".
Cuixart se ha referido a la confrontación entre partidos secesionistas en la Universidad de Vic (Barcelona), en el marco de la Trobada Nacional d'Òmnium Cultural, que ha reunido a más de 250 cuadros directivos de la entidad nacionalista, tanto de la junta nacional como la cincuentena de juntas territoriales.
Forzar a los partidos
Según el presidente de Òmnium, "la causa por la libertad de Cataluña está por encima de las batallas y dinámicas de parte" y ha opinado sobre estas últimas que "la discusión es tan de matiz que no sabemos a qué responde".
Es por esto que Cuixart apuesta por abrir "una nueva etapa" en la que no se trata de ir "sólo a la contra", sino de ser capaces "de ser también proactivos", porque en caso contrario "entraremos en una situación de bloqueo". "O los partidos se vuelven a sentir forzados por la sociedad civil, o pasará lo que ha pasado durante muchos años en este país: que vayan gestionando el día a día, sin una propuesta en concreto", ha añadido.
"Volverlo a hacer, juntos y mejor"
En su opinión, "la lucha no violenta es el mejor instrumento para forzar a nuestros políticos", y ha añadido que el objetivo "es volverlo a hacer, hacerlo juntos y hacerlo mejor". "Esto nos complica la vida, sí, pero no nos pusimos en esto para negociar unas competencias", ha agregado, en clara alusión a ERC, sin citarla.
"Nos pusimos en esto porque estamos convencidos de que como sociedad tenemos el derecho de luchar por un estado propio", ha recalcado el presidente de Òmnium.
El catalán, "peor de lo que pensábamos"
Sobre la situación de la lengua catalana, Cuixart ha advertido que "es peor de lo que pensábamos" y esto ocurre, ha dicho, porque los poderes del Estado "entienden la diversidad como un ataque".
Sin embargo, ha asegurado que "no conseguirán" eliminarla, ha puntualizado, porque "la fractura social en Cataluña no va de identidad, es entre los que pueden llegar a final de mes y los que no pueden llegar".