El expresidente catalán prófugo, Carles Puigdemont, ha rechazado hoy que la mesa de diálogo entre la Generalitat de Cataluña y el Gobierno aborde una "solución personal" para él, que se fugó de la justicia en 2017.
En un artículo en El Punt-Avui, El ex jefe de Govern huido de España se dirige directamente a ERC, socio de Junts en el Ejecutivo autonómico, para pedir que su situación personal "no forme parte de ninguna agenda de la denominada mesa de diálogo acordada por Esquerra" y Moncloa. El huido exige "respeto, también a mi Govern".
Rechazaría el indulto anticipado
A renglón seguido, el dirigente de la fuerza neoconvergente sostiene que "no busca un indulto anticipado". Según él, un perdón parcial de este tipo, antes de un proceso judicial que eludió al fugarse de España, "no aportaría ninguna solución al conflicto".
Bajo su punto de vista, abordar la cuestión territorial en Cataluña debería pasar por dar solución a lo que él llama "las 3.000 personas afectadas por la represión".
Asume que será entregado o no volverá
La posición maximalista de Puigdemont le lleva a reconocer que se enfrenta a dos posibles "escenarios negativos". Uno de ellos es que sea detenido en algún país de la Unión Europea y, después, entregado a España, admite.
El otro, siempre según él, es permanecer fugado "durante mucho tiempo", como actualmente, ya que lleva cuatro años cobijándose en Bélgica.