La pérdida de capacidad de movilización del secesionismo ha vuelto a quedar en evidencia este jueves. Apenas 200 personas han acudido a la concentración para protestar en la plaza de Espanya contra la presencia del rey, Felipe VI, en el salón Automobile, que se celebra estos días en el recinto ferial de Montjuïc.
La manifestación, convocada como de costumbre por las asociaciones afines al Govern ANC, Òmnium y los autodenominados Comitès de Defensa de la República, pretendía expresar el rechazo que les causa la presencia de Felipe VI en la ciudad, algo que consideran "una provocación" en vísperas de cumplirse el cuarto aniversario del referéndum ilegal y unilateral de secesión del 1 de octubre de 2017. La visita del monarca, y la de otras autoridades como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, obedece a la inauguración del salón internacional del automóvil de Barcelona, uno de los eventos feriales más destacados del año.
Corte del tráfico y quema de banderas españolas
En la concentración, realizada a escasos metros de la Fira, han participado representantes de ERC, JxCat y la CUP, así como de las asociaciones antes citadas. Los escasos asistentes han cortado la circulación de la plaza de Espanya --donde confluye una de las más importantes arterias de la ciudad, la Gran Vía-- durante dos horas y algunos radicales han quemado banderas de España.
Los manifestantes han exhibido pancartas con lemas como "Cataluña no tiene rey" y han proferido consignas como "fuera el Borbón", "1-O ni olvido ni perdón" y "fuera la Corona española".
"Rey de los españoles"
Los dirigentes de la movilización han proferido también sus consignas ultranacionalistas habituales: "Hoy estamos aquí para decir que Cataluña no tiene rey y que este rey de los españoles no es bienvenido", ha manifestado en declaraciones a los medios el vicepresidente de la ANC, David Fernández, que ha exigido a los políticos independentistas que sean "fieles" a lo que denomina "el mandato del 1-O".
El miembro de la junta nacional de Òmnium Gerard Pijoan ha criticado que el Rey haya venido a Cataluña en vísperas del 1-O, "exhibiendo impunidad y de una forma insultante", en sus propias palabras.
Entre las reacciones de los representantes políticos, la diputada de la CUP en el Congreso Mireia Vehí también ha cargado contra la Generalitat por haber participado, con una delegación encabezada por el conseller de Empresa y Trabajo, Roger Torrent, en el acto de inauguración del salón Automobile junto con Felipe VI, a pesar de que el primero ha evitado saludar al monarca y de que el presidente del Govern, Pere Aragonès, ha dado incluso plantón a la cita.