La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha lanzado una nueva iniciativa polémica en clave procesista. Ha anunciado un acto de homenaje el próximo martes en la Cámara al expresidente catalán Quim Torra con motivo de su primer año de inhabilitación. El 28 de septiembre de 2020 ue condenado por desobediencia por no retirar a tiempo una pancarta partidista del Palacio de la Generalitat en periodo electoral.
El expresidente de la Generalitat, Quim Torra, en una imagen de archivo / DAVID ZORRAKINO - EUROPA PRESS
Fuentes de Presidencia han concretado a Europa Press que se ultima una “recepción” sin tanta pompa ni circunstancia como sería un “acto de homenaje” al uso. Se plantea que Torra sea recibido por Borràs y por su sucesor en el cargo, Pere Aragonès, en el inicio de una sesión clave que tendrá lugar esa jornada. El primer Debate de Política General (DPG) que desarrolla el republicano como presidente de la Generalitat plenipotenciario.
Borràs pasa de informar a la Mesa
La preparación del acto de reconocimiento se ha hecho pública a raíz de un problema en el encuentro de los miembros de la Mesa del Parlament. Se había pedido adelantar a las 15 horas la votación de los senadores por designación autonómica --entre ellos la nueva portavoz del Senado, la socialista Eva Granados-- para que a las 16 horas pudiera tomar la palabra Aragonès sin más dilaciones. Con todo, Borràs ha explicado a los diputados que no podía estar presente en el hemiciclo porque tenía “otro compromiso”.
Más tarde, ha trasladado a algunos diputados que iban a realizar la recepción a Torra a la misma hora. No lo ha comunicado a la Mesa del Parlament. “En ningún caso se trata de una propuesta que deba ratificar la Mesa”, ha justificado la política de JxCat.
Protagonismo de JxCat
Fuentes políticas interpretan que el acto de Torra ha sido metido con calzador en la agenda política del próximo martes. Se ve como un intento de empañar la puesta de largo de Aragonès ante el hemiciclo catalán, ya que el republicano ha declinado presentar el plan de gobierno ante la prensa para ponerle voz ante el Parlament, “donde está representado todo el pueblo catalán”.
Se ha proyectado un acto solemne. Aun así, los dos miembros del llamado sector duro de JxCat robarán protagonismo al president.