El Ayuntamiento de Barcelona ha ordenado la vuelta al trabajo presencial de sus funcionarios y trabajadores que realizaban trabajo a distancia: desde esta semana, están obligados a desarrollar sus funciones en sus puestos presenciales tres de los cinco días laborables, a pesar de que los contagios por la quinta ola del coronavirus están disparados en la autonomía.
La gerencia del consistorio ha publicado una instrucción basada en la normativa de la Generalitat de Cataluña, en la que obliga a los trabajadores municipales que hacían teletrabajo a trabajar tres días a la semana de modo presencial "garantizando las distancias de seguridad y la medidas de protección y prevención de riesgos laborales que correspondan".
Proporción inalterable
Esta instrucción prevé, además, que "en función de las necesidades organizativas" de cada servicio, se pueda autorizar que su prestación se lleve a cabo "con otras combinaciones semanales, manteniéndose en todo caso la proporción en tiempo trabajado de tres días en la modalidad presencial por dos días en la modalidad a distancia".
La reincorporación presencial parcial afecta tanto a los trabajadores del ayuntamiento como de sus organismos autónomos y entidades empresariales o sociedades mercantiles de participación mayoritariamente municipal, así como a consorcios, fundaciones y asociaciones adscritas al Ayuntamiento de Barcelona. Y también al personal de la Agencia de Salud Pública de Barcelona y al del Consorcio de Turismo de Barcelona.
Grupos vulnerables y reuniones
Según la instrucción municipal, la reincorporación también es obligatoria para los trabajadores que pertenezcan a grupos vulnerables, excepto en aquellos casos en los que el servicio de vigilancia de la salud indique lo contrario.
La orden especifica que las reuniones de trabajo se tendrán que celebrar preferentemente por medios telemáticos, videoconferencia o teléfono, y que las presenciales "se han de limitar a las estrictamente necesarias y respetando los límites de aforo de las salas".
Los espacios de comedor para los trabajadores municipales, que estaban en situación de teletrabajo --excepto los cuerpos de seguridad y otros que no pueden desarrollar sus funciones a distancia-- seguirán cerrados.
Alto riesgo de rebrote
La instrucción, publicada la semana pasada, reconoce el alto riesgo de rebrote de la pandemia, pero especifica que los contagios se producen de forma mayoritaria en la franja de edad de entre 15 y 29 años, aún sin vacunar, y que la actual plantilla del ayuntamiento cuenta con un colectivo de 18 a 30 años formado por 408 personas --el 5,56 % de la plantilla--, de las que 288 son miembros de la Guardia Urbana y de los bomberos, que ya están vacunados por ser profesionales esenciales.
Las instrucciones del consistorio encabezado por Ada Colau siguen las pautas dictadas por la Generalitat de Cataluña en su instrucción 1/2021, del pasado 7 de julio, de medidas organizativas, de prevención y seguridad para la reincorporación en los centros de trabajo del personas de la Administración de la Generalitat. En la Administración autonómica catalana, sus funcionarios y empleados también tienen que ir algunos días a la semana a su puesto presencial respetando las medidas higiénicas y de seguridad necesarias para evitar contagios.