Barcelona en Comú lidia con una rebelión contra la recogida de basura puerta a puerta. El partido de Ada Colau asegura que el sistema, que ha sublevado a residentes de Sant Andreu del Palomar de la Ciudad Condal, tiene un éxito del 65%. La cifra no aplaca a los hogares donde tiene lugar la prueba piloto. Algunos de ellos irrumpieron ayer en la sede del distrito durante un consejo de barrio.
Horas después de los momentos de tensión, el gobierno municipal se ha defendido. En una nota, el Ejecutivo local ha señalado que durante la primera semana de implementación del sistema en 5.475 hogares se ha pasado del 37% al 65% en materia de recogida selectiva. Lo que es más: el bipartito que gobierna la capital catalana sostiene que el 73% de núcleos familiares de la zona "participan" en el puerta a puerta.
"Escuchamos a la ciudadanía"
El gobierno local, que impulsa la recogida frente a las viviendas con bolsas con chip identificativo, sostiene que se encuentra en un periodo de "escucha activa" de la ciudadanía. Esta proactividad, sostienen, ha permitido "recoger demandas, información y sugerencias de los vecinos con el objetivo de mejorar el servicio y adaptarlo a las necesidades del territorio".
La fase informativa, que se remonta al inicio del servicio, "ya recogió" diversas aportaciones de los vecinos en el marco de la comisión de seguimiento creada con las asociaciones de vecinos, comerciantes y distintas entidades. También hubo reuniones con representantes de las comunidades de vecinos y encuentros informativos en los "puntos informativos habilitados". El contacto permitió incluir medidas para hogares en los que vive gente mayor o con problemas de movilidad.
Rebelión y nuevas protestas
Todo ello ha servido de poco, por el momento. Vecinos de los casi 6.000 hogares que participan en la segunda prueba de la recogida de basura puerta a puerta en Barcelona --la primera se inició en 2018 en el casco antiguo de Sarrià-- se han organizado contra el sistema. Preparan protestas.
Por lo pronto, ayer irrumpieron en el consejo de barrio de Sant Andreu y acusaron a la edil del distrito, Lucía Martín (Barcelona en Comú) de "esconderse" para afrontar las demandas de los residentes.