El concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica de Barcelona, Eloi Badia, ha abierto la puerta a determinar horarios para llevar a los perros a parques y jardines. La medida ha sido muy criticada por colectivos animalistas, lo que ha obligado al dirigente de los comunes a precisar sus declaraciones horas más tarde.
Badia explicó a Betevé que ahora ya hay suficientes áreas para animales de compañía y hay que "proteger la naturaleza". Por ello, afirma, hay que analizar qué espacios públicos, como parques, son compartidos y cuáles no. "Podemos encontrar horarios, más espacios o espacios donde no se permita el acceso de perros", dijo. Posteriormente, el concejal matizó sus afirmaciones a través de Twitter, asegurando que cuando hablaba de la posibilidad de fijar horarios no se refería a parques --donde los animales ya deben ir atados excepto en zonas específicas--, sino a zonas de uso compartido y que, en todo caso, hablaba de franjas horarias en las que los perros podrían ir desatados y otras que deberían ir atados.
Levantar la moratoria
En todo caso, Badia señaló que "ya tocaría" levantar la moratoria que permite el acceso generalizado de perros en espacios verdes hasta que la ciudad se dote de suficientes áreas de recreo para perros. Según el ayuntamiento, Barcelona cuenta con más de 100 áreas para perros. Casi la mitad de las áreas tienen entre 300 y 400 metros cuadrados. Sin embargo, Àngela Coll, portavoz de Espai Gossos BCN considera que "Badia habló de dos cosas diferentes, por un lado de las zonas de usos compartidos y por el otro de este tipo de manía que les ha cogido con la palabra biodiversidad, que parece que la hayan aprendido ayer mismo. La realidad es que es un ignorante. Le podríamos decir que el Ayuntamiento de Barcelona lanza tonelada y media de petardos por la fiesta de Nochevieja, y parece que esto no fastidia la biodiversidad, cuando tenemos cantidad de informes técnicos de cómo afecta la pirotecnia a las aves. Por lo tanto, de biodiversidad este señor no entiende nada".
En referencia a las más de 100 áreas de recreo para perros, Coll afirma que "es mentira. Hay 43. El resto hasta 100 son áreas de perros que son básicamente pipicans a los que han cambiado el nombre para hacer parecer que tenemos una maravilla".