En 40 años los consensos han desaparecido. El independentismo da la espalda, otra vez, al rey Felipe VI en un acto de una gran significación simbólica. Los partidos independentistas catalanes, Junts per Catalunya, ERC, PDECat y la CUP, han decidido ausentarse en el acto que este martes celebrará el Congreso para conmemorar el 40 aniversario del 23F, con la presencia del jefe del Estado, el rey Felipe VI.

Los independentistas catalanes se unen a Bildu y al BNG en esa decisión, que muestra el total distanciamiento con la corona, pero que también evidencia que no se desea compartir lo que supuso el 23F: un golpe de estado frustrado, cuya superación consolidó la democracia en España.

También el PDECat de Chacón

Ese proceso se ha demostrado, a juicio del independentismo, una especie de fraude. Y alimenta, la idea de que no se logró un cambio real al pasar de la dictadura a la democracia, los proyectos de ruptura que defienden desde Junts per Catalunya al BNG, pasando por Bildu, ERC y la CUP. Se añade también a esa decisión, de no asistir al acto que presidirá el rey Felipe VI, los cuatro diputados del PDECat, la escisión de JxCat, que se mantienen en el Congreso. A pesar de renunciar a la vía unilateral, el partido que dirige Àngels Chacón, y que no ha obtenido representación en el Parlament de Cataluña, mantiene las mismas tesis que el partido de Carles Puigdemont respecto a la Corona.

En el impedimento de que el 23F pudiera tener éxito tuvo un papel esencial el rey emérito Juan Carlos I, quien se negó a que saliera adelante el plan trazado por el General Armada, y que tampoco vio con buenos ojos el responsable directo del golpe, el coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero.