El mismo discurso hasta el último minuto, y justo antes de iniciar la campaña electoral. Joan Canadell ha utilizado la Cámara de Comercio de Barcelona, para centrarse en su nueva etapa como número dos de la lista de Junts per Catalunya (JxCat) a la Generalitat, con un discurso de despedida en el que denuncia el “déficit fiscal” que “ha impedido a Cataluña ser como el norte de Europa”.
Canadell ha aprovechado un estudio de la organización de dinamización empresarial sobre la productividad y el crecimiento de Cataluña en los últimos veinte años en comparación con los países “frugales” de Europa --los países del norte y centrales de la Unión Europea-- para insistir en que el déficit fiscal ha perjudicado a la economía catalana. Aunque ha admitido que ese supuesto déficit “no lo explica todo”, sí ha señalado que podría haber sido un “gran instrumento” para invertir “bien” y modernizar la economía catalana que necesita “más talento y empresas competitivas”, a diferencia de “cómo ha malgastado el dinero, con ese déficit fiscal catalán, el Estado español, con inversiones poco productivas”.
Canadell se atribuye el espíritu fundacional de la Cámara
El estudio, que ha dirigido el economista Josep Ramon Rovira, va en esa dirección, al concluir que la convergencia de Cataluña con Austria, Dinamarca o los países centrales de la UE, se hubiera acercado “reduciendo el déficit fiscal”, pero también con una “mayor y mejor inversión en capital humano y tecnológico”, y con “un marco institucional” acorde a esos objetivos. De hecho, Rovira ha destacado que lo más determinante para lograr esa conversión, es “una mejora de la eficiencia con la que se combinan los recursos productivos disponibles, principalmente trabajo y capital, y la intensidad de la inversión en capital humano y tecnológico”.
Pero Canadell quería despedirse y mantener el mensaje que ha reiterado desde todo su mandato al frente de la Cámara, con la idea de que él mismo ha podido “recuperar el espíritu fundacional” de la institución, con una ayuda “a las pequeñas empresas y a los autónomos”. Eso sí, ha admitido que su “frustración” ha sido el no poder aprobar “la ley de cámaras”, y que ahora se lo pone como reto, en su etapa como dirigente político de Junts per Cataluña. “Yo soy el responsable, como presidente de la Cámara y me hubiera gustado que se aprobara”. Canadell ha insistido en que hará "todo lo posible" para que se apruebe esa ley, desde el Parlament. Y que luchará para "la independencia de este país, un gran sueño que será realidad", de "sentar las bases para un estado propio".
Relevo a Mònica Roca
El acto en la Llotja de Mar lo ha aprovechado Canadell para pronunciar, posteriormente, un discurso en el que “renuncia” a la presidencia de la Cámara, para mantener su carrera política a través de Junts per Catalunya. Y ha defendido la candidatura de Eines de País, dando paso a la hasta ahora vicepresidenta Mònica Roca.
Canadell ha sacado pecho, al entender que “el independentismo ha sabido liderar una institución importante como la Cambra”, y que la institución “ha sabido estar al lado del Govern, en el otoño de 2019, y durante la pandemia”.