Miquel Sàmper admite que fue "un error no alargar las restricciones de fin de semana" durante el puente de diciembre. Eso sí, a pesar de que el conseller ha entonado el mea culpa por el aumento de la movilidad durante los días festivos, el Govern permitirá desplazamientos por todo el territorio para las celebraciones navideñas. Aunque la movilidad está restringida ahora al ámbito comarcal, bajo el pretexto de acudir a segundas residencias, visitar a familiares o estancias en alojamientos turísticos, cualquiera podrá circular por la comunidad.
Preguntado por esta cuestión en una entrevista en El Punt Avui, Sàmper ha subrayado que la intención es que las restricciones sean "poco agresivas", aunque "consecuentes con el momento epidemiológico". Es decir, el objetivo, según el titular de Interior, es frenar los contagios, pero "buscando un equilibrio" con la economía y el "desgaste social".
Colas en comercios
La reapertura de los centros comerciales, con un aforo del 30%, obedece, apunta el conseller, a "esponjar" la afluencia de público a las superficies comerciales, y evitar nuevas aglomeraciones. Colas como las que se produjeron durante el puente de la Constitución, con el que dos semanas después se dispararon los contagios en el territorio y que han llevado a la Generalitat a imponer el cierre parcial de la restauración. Bares y restaurantes solo podrán servir desayunos de las 7.30 a las 9.30 horas, y almuerzos entre las 13.00 y las 15.30 horas. El resto de la jornada, su actividad se limitará a preparar comida para llevar.
No así los espacios de restauración que se encuentren en el interior de centros comerciales, que tendrán que cerrar, al menos, hasta el próximo 11 de enero. Los gimnasios mantendrán su actividad con un aforo del 30% aunque todos sus usuarios deberán usar mascarilla.
Tercera ola de la pandemia
Estas son de las pocas restricciones que ha implementado el Govern para tratar de frenar la tercera ola de la pandemia. Para las reuniones navideñas, la Generalitat mantiene el límite de grupos de 10 personas, siempre que formen parte de dos "burbujas" de convivencia. Sàmper señala además que estos encuentros serán "incontrolables". "No puedes entrar en cada domicilio, se trata de generar un sentido de autorresponsabilidad", ha indicado el conseller.