Ada Colau contrata a Endesa con suma discreción. La alcaldesa de Barcelona ha pasado de criticar a la compañía energética, tildándola de la "empresa que más emisiones provoca en España", a comprar su gas hasta 2022. Todo ello en el espacio de apenas diez meses.
El Ayuntamiento de Barcelona, que preside Colau, ratificó en su última comisión de gobierno la adhesión al acuerdo marco de suministro de gas firmado entre Endesa y la Asociación Catalana de Municipios (ACM). En virtud de este pacto comercial, la eléctrica y gasista ofrece este último suministro a los entes locales de la región en condiciones ventajosas. A cambio, los consistorios se lo compran a buen precio. ¿Por cuánto? En el caso de la Ciudad Condal, por casi dos millones de euros el primer año, que se puede ampliar 12 meses más, hasta 2022.
"La empresa que más emisiones provoca"
El contrato de suministro de gas entre el Ayuntamiento de Barcelona y Endesa sería uno más en el colosal presupuesto municipal si no fuera por la posición militante de la jefa de la corporación contra la cotizada. Hostilidad que la propia Colau ha verbalizado en varias ocasiones. La última, con motivo de la cumbre del clima COP25 celebrada en Madrid en 2019, cuando la edil cargó contra una campaña de la energética en la prensa escrita. "En el día en que se inaugura la #COP25, Endesa, la empresa que más emisiones provoca en España, compra la portada de la mayoría de periódicos. Una imagen demoledora del descrédito más que justificado del sistema político, económico y mediático actual", señaló la munícipe.
Pero es que Colau llevó su argumentario un paso más allá. Aseguró a renglón seguido que Barcelona "ha desconectado de Endesa" mediante la creación de Barcelona Energia, la eléctrica 100% pública que ha sido un rotundo fracaso en captación de clientes, tal y como avanzó este medio. Poco después, lanzó al pleno municipal contra la misma empresa con una acusación nada menor: impulsar 63.000 cortes de luz desde la aprobación de la ley autonómica contra la pobreza energética [ver texto aquí]. Antes del crítico acuerdo en sesión plenaria, el ayuntamiento ya había amenazado con multar a la compañía por los cortes de suministro por impago y le incoó 27 expedientes disciplinarios que llevaban aparejadas multas de hasta 10.000 euros por este mismo motivo, según adelantó El País.
Endesa: "Un 85% de energía sin emisiones en 2022"
Desde Endesa, una portavoz ha reiterado el respeto más absoluto por las instituciones. Esta posición de deferencia con las administraciones les llevan a no entrar a hacer valoraciones sobre declaraciones políticas. Sí que ha recordado la fuente oficial que el plan estratégico de la empresa hasta 2022 coloca la transición energética y la descarbonización "en el centro" de la operativa.
Es en este marco, recalca Endesa, que deben leerse los ceses de actividad de las centrales térmicas de Compostilla (León), del Litoral en Carboneras (Almería) y el de la planta de Andorra (Teruel), que quemó sus últimas toneladas de carbón en junio de este año a la espera de la autorización ministerial de cierre. De hecho, el grupo que comanda José Bogas prevé que el 85% de su energía se genere con renovables en dos años.
Proveedor habitual
Sea cual fuere el plan verde de Endesa, el contrato con el Ayuntamiento de Barcelona no es el primer vínculo entre Administración y compañía energética. Cabe recordar que la firma ganó el concurso para proveer a Barcelona Energia con el certificado de energía de origen verde, algo que la eléctrica municipal no había conseguido.
Al margen de ello, la energética arrimó el hombro con la capital catalana durante la primera ola de la pandemia del coronavirus. Donó 250.000 euros en material sanitario al ayuntamiento, cifra que se sumó a los apoyos al Instituto Catalán de Salud (ICS) y a los respiradores cedidos al Servicio Catalán de Salud (CatSalut), algunos de los cuales recalaron en hospitales barceloneses.