Fue Clara Campoamor, durante la II República, quien impulsó la aprobación del sufragio femenino en España. Este jueves, se cumplen 89 años del discurso que pronunció la diputada en el Parlamento. Un alegato en el que presentó a las mujeres como ciudadanas de pleno derecho. Sujetos que debían incorporarse a las leyes; algo impensable entonces.
Con motivo de esta efeméride, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha manifestado que "sin igualdad y sin feminismo no hay democracia". También la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha reconocido a Campoamor como "elemento fundamental de la democracia" española.
Derecho fundamental
En la misma línea se ha pronunciado la ministra de Igualdad, Irene Montero, quien ha recalcado que la diputada es una figura icónica y clave para que las mujeres fuesen consideras ciudadanas de pleno derecho. Y es que Campoamor desafiaba intelectualmente a sus compañeros diputados --en 1931, cuando solo tres de los 470 parlamentarios eran mujeres-- asegurándoles que carecían del derecho fundamental "que se basa en el respeto a todo ser humano" y que se limitaban a detentar el poder.
"Dejad que la mujer se manifieste y veréis como ese poder no podéis seguir detentándolo", alentó entonces. En homenaje, tal y como avanzó ayer María Jesús Montero, la madrileña estación de Chamartín pasará a llamarse Clara Campoamor. Un cambio para honrar a la impulsora del sufragio universal, "que huyó de España tras el Golpe de 1936", recordó la portavoz del Ejecutivo central.