La ministra portavoz, María Jesús Montero, ha criticado la actitud del president de la Generalitat, Quim Torra, con la celebración de la mesa de diálogo que tanto piden desde el Govern. Montero ha asegurado que el Gobierno tiene "disponibilidad absoluta" para que se celebre en agosto, pero que se ha preguntado si Torra realmente quiere reunirse antes de las elecciones catalanas.
Desde el Gobierno afirman que han estado esperando todo el mes de julio para encontrarse, pero que la Generalitat no ha querido celebrar la reunión. De hecho, Montero ha subrayado que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha dicho que sí a la mesa, ERC también y, ahora, solo falta que el Govern se ponga de acuerdo sobre qué es lo que quiere, "reunir a la mesa de diálogo: ¿sí o no?".
La voluntad de acabar con el conflicto
"Hemos tenido disponibilidad absoluta en el mes de julio, que era la primera tentativa, y tenemos disponibilidad en el mes de agosto", ha dicho la portavoz del Gobierno antes de instar a Torra a aclarar qué quiere hacer. "No puede mantener mucho tiempo esta situación de sí pero no", ha señalado Montero.
El problema que ve la ministra es que, según su opinión, todas las formaciones políticas catalanas están ya en clave electoral, y de ahí las dudas para convocar la mesa. Pese a estos desencuentros, Montero ha apelado a dialogar porque "tenemos que ser capaces de pacificar una situación que ha durado demasiado tiempo".
No toleran la actitud de Torra
Montero ha expresado el convencimiento de que la solución al conflicto catalán pasa por el diálogo y, por tanto, se tendrán que producir las reuniones oportunas para avanzar en esa senda siendo conscientes de que la posición del Gobierno de España respecto a las cuestiones que Torra plantea de forma recurrente y que tienen que ver con la autodeterminación o el referéndum "es cristalina".
Sobre la petición del president de mantener esta semana una reunión telemática con Pedro Sánchez para el reparto de fondos europeos y la aportación estatal a la financiación de Cataluña, Montero ha tildado de "esperpento" que la Generalitat pida ahora un resumen privado de lo tratado en la Conferencia de presidentes autonómicos de San Millán de la Cogolla (La Rioja), a la que declinó asistir. "No tiene ni pies ni cabeza, es absurdo", ha subrayado Montero.