El Govern de la Generalitat ha acordado este martes aprobar el pago del 60% de la paga extra de 2013 que todavía debía a sus funcionarios desde el año 2013, a causa los severos recortes aplicados en Cataluña por Artur Mas. El abono se hará efectivo en la nómina de julio, aunque con ello el Ejecutivo independentista no habrá saldado sus deudas, pues aún le adeuda otra paga a sus trabajadores públicos: la correspondiente a 2014, que tardarán al menos dos años en saldar.

La Generalitat ya pagó el año pasado el 40% de la extra de 2013, por lo que ahora se completará la devolución íntegra de dicha paga que los funcionarios dejaron de percibir como consecuencia de las restricciones presupuestarias aplicadas por los independentistas.

En este momento, sin embargo, todavía queda pendiente la devolución de la paga extraordinaria de 2014, que el Ejecutivo catalán tiene previsto abonar a sus trabajadores públicos durante los ejercicios 2021 y 2022, tal y como acordó con los sindicatos de la función pública en diciembre de 2018..