La Generalitat de Cataluña persiste en su empeño de politizar la lengua y dedicar tiempo, dinero y recursos a erradicar la presencia y uso del castellano en cualquier espacio o canal de comunicación a su alcance. En plena crisis sanitaria, social y económica por la pandemia de coronavirus, la Consejería de Cultura del gobierno autonómico acaba de publicar un estudio para incrementar el uso del catalán en el entorno de los youtubers, instagrammers e influencers en redes sociales. Y una de las medidas que plantea es remunerarles, a ellos y a las plataformas, para que cambien de lengua y hagan sus contenidos en este idioma.
La consejería encabezada por la posconvergente Mariàngela Vilallonga (JxCat) ha impulsado el informe, de casi 100 páginas y titulado "Catalán, youtubers y instagramers. Un punto de partida para promover el uso de la lengua", a través de su Direción General de Política Lingüística.
Seguimiento a 'influencers'
El estudio, elaborado por el Centre de Recerca en Sociolingüística i Comunicació Universitat de Barcelona (CUSC), se centra en analizar el uso del catalán en los contenidos generados por parte estrellas del mundo digital dirigidos a adolescentes y jóvenes, y formula propuestas para la promoción del catalán en este terreno. Entre ellos, pagarles para que lo hagan.
El trabajo, según reconoce la Generalitat en su comunicado, se fija en la comparación con el uso del castellano --lengua cooficial de Cataluña-- y revela que "las métricas favorables" a este último idioma en números absolutos "se reducen cuando se tiene en cuenta la dimensión de la comunidad lingüística". Hecho que lleva a los autores del informe y al Govern independentista catalán a concluir que "con esta ponderación, en Instagram el catalán ofrece mejores resultados que el castellano y en el caso de Youtube existe una aproximación importante".
"Estímulo económico"
Tanto la Generalitat como los autores del estudio valoran "el desplazamiento del consumo audiovisual hacia las redes" y la importancia en las mismas de los influencers "como referentes juveniles". Y apuntan al "grado de profesionalización y las causas que provocan la minorización del catalán, que se sitúan entre las dinámicas de mercado y las ideológicas, entre otros aspectos" (sic).
Ante esta situación que tanto inquieta a los dirigentes independentistas, "se plantean líneas de acción como el estímulo económico al posicionamiento de los contenidos catalanes en las plataformas, la remuneración suplementaria de visitas para compensar el sesgo económico que supone a los youtubers e influencers la dificultad para monetizar sus esfuerzos en unas plataformas con baremos de monetización pensados para lenguas globales, la financiación de contenidos especializados en catalán, la facilitación del contacto entre microinfluencers que usan el catalán y empresas para favorecer acuerdos de patrocinio y el impulso de la presencia de los influencers catalanes en acontecimientos para que hagan la adaptación en reproducción en línea a sus formatos de trabajo", según admite el comunicado la Consejería de Cultura de la Generalitat.