El PNV se ha borrado de la Declaración de la Llotja de Mar de Barcelona, un acto que ha unido a partidos nacionalistas de toda España para firmar una declaración conjunta. Los puntos básicos del manifiesto son la reclamación de un acuerdo político sobre la crisis catalana, la defensa del derecho a la autodeterminación y la liberación de los “presos políticos”.
La formación vasca ha argumentado su ausencia con la falta de “espíritu constructivo” del manifiesto y con la proximidad del 10N. Para el PNV no es “el momento más oportuno”, y el PDeCAT, su “partido hermano en Cataluña”, comprende este posicionamiento. Y le invita a trabajar en el futuro, “en un contexto más reposado y con el margen de tiempo que demandan los grandes acuerdos”. En cambio, sí han escenificado este compromiso partidos nacionalistas catalanes, gallegos, baleares, valencianos y el también vasco EH Bildu.
Seis puntos
En concreto, han firmado el documento BNG (con Bieito Lobeira), Crida Nacional, CUP (representada por Natàlia Sánchez), Demòcrates, EH Bildu (con presencia de Arnaldo Otegi y Maddalen Iriarte), ERC (ha acudido Marta Vilalta), Esquerra Valenciana, MÉS per Mallorca, MÉS per Menorca y PDeCAT-JxCat. No han faltado el vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ni el conseller de Políticas Digitales, Jordi Puigneró. Estos son los seis puntos que han firmado:
–Tras cuatro décadas de la aprobación de la Constitución Española de 1978, “se consta” la imposibilidad de una plena democratización del Estado por “la resistencia de las viejas estructuras del régimen anterior”. Por "acción u omisión", se ha impedido que España sea un país "plenamente democrático y moderno de su entorno europeo".
–El Estado español “ha entrado en una etapa de regresión hacia una política de carácter cada vez más autoritaria, menos democrática y más represiva”.
–“Falta de respeto al derecho a la autodeterminación que España asumió y reconoció” al firmar el Pacto Internacional por los Derechos Civiles y Políticos. En España “no existe ningún reconocimiento ni respeto por la plurinacionalidad, ni ninguna separación de poderes”. Por el contrario, existen “continuas amenazas de suspensión de la autonomía, el autogobierno y los derechos históricos por cualquier vía”. El texto también denuncia el “intervencionismo” del Tribunal Constitucional y “una acción legislativa recentralizadora”, así como las detenciones “arbitrarias de líderes políticos y sociales y la persecución policial de activistas y actividades políticas de carácter no violento”.
–Necesidad de llegar a un acuerdo político para unirse en defensa del derecho a la autodeterminación de estos pueblos, el carácter democrático y pacífico de su acción política, la libertad de los presos y el retorno de “los exiliados”, las libertades civiles y políticas.
–“Desde la defensa de estos contenidos, asumimos y manifestamos nuestro compromiso con la búsqueda de soluciones democráticas y estables al conflicto político que nuestros pueblos mantienen en el seno del Estado español”.
–Finalmente, los partidos firmantes apelan a la comunidad internacional para posibilitar, apoyar y promover estas soluciones.
El PNV se solidariza con el “pueblo de Cataluña”
Respecto al contenido, el PNV ha explicado que en un principio se les planteó la declaración suscrita “como una segunda versión” de la histórica Declaración de Barcelona que en 1998 firmaron CiU, EAJ-PNV y BNG. Sin embargo, “a diferencia de aquella, esta incide de forma exclusiva en la denuncia y en la proyección de una visión negativa de la realidad actual en el Estado español, sin apenas espíritu constructivo y/o propositivo”, ha opinado el PNV.
Por último, el PNV ha subrayado que su “solidaridad, cercanía y el apoyo con la causa del pueblo de Cataluña, las formaciones soberanistas y los dirigentes que hoy cumplen injustas penas de prisión o se encuentran a miles de kilómetros de su nación ha quedado más que demostrada en innumerables ocasiones y en un sinfín de pronunciamientos públicos” de su ejecutiva y de sus dirigentes.