Sindicatos de la Guardia Urbana de Barcelona han pedido hoy miércoles activarse para recuperar el orden público en la ciudad. Los agentes han recordado que hay unos 180 agentes antidisturbios que pueden colaborar con Mossos d'Esquadra y Policía Nacional, pero que están "acuartelados por órdenes políticas". Su petición llega después de que el partido de Ada Colau llamara ayer a salir a la calle y, tras los disturbios del Paseo de Gracia, los condenara.
En una nota pública, el sindicato CSIF ha lamentado la "dejación de funciones" de la primera edil. Según la agrupación, la munícipe "llama a la movilización pero retira a su policía para evitar la confrontación. Tampoco destina los recursos suficientes para poder permitir que la circulación en Barcelona se restablezca con rapidez y garantizar la seguridad y el orden público, que es su competencia". Según CSIF, "no se está sacando a la calle a la unidad antidisturbios de la GUB (USP, Unidad de Apoyo Policial, por sus siglas en catalán) que deberían estar dando apoyo a los policías para evitar colapsos y están enviando a esta unidad a servicios estáticos, escondidos, para que no se les vea". Atribuye esta decisión a criterios "políticos" del gobierno municipal de Barcelona.
Colau se pone de perfil
El llamamiento del sindicato de la Guardia Urbana llega en un momento en el que Ada Colau se está poniendo de perfil ante las algaradas independentistas en el aeropuerto de Barcelona-El Prat el lunes y los graves disturbios en el centro de la ciudad el martes. La alcaldesa de Barcelona solo tuiteó ayer martes a las 11:57 horas de la noche para "rechazar" los enfrentamientos en la calle cuando éstos llevaban varias horas en marcha. Tal y como ha avanzado Metrópoli Abierta, Colau abandonó la ceremonia de entrega de los Premios Planeta por los incidentes en el centro de la ciudad. No obstante, no se la ha visto desde entonces.
Sí ha reaccionado y ha dado la cara el primer teniente de alcalde, Jaume Collboni (PSC), que ha visitado el miércoles por la mañana el Centro de Coordinación (CeCor), desde donde se coordinan los dispositivos para garantizar el orden público en Barcelona. Ha pedido Collboni "calma y responsabilidad" y ha agradecido la labor de todos los trabajadores municipales para "recuperar la normalidad".
El Ayuntamiento, en 'lockdown'
La actividad de Collboni, que ha apoyado también el arranque de la feria Barcelona Meeting Point (BMP), el mayor salón inmobiliario de España, contrasta con la parálisis del consistorio. Las comisiones municipales programadas para esta semana han sido aplazadas hasta el próximo lunes y martes a petición de ERC y JxCat. Por contra, sí habrá un pleno extraordinario mañana jueves, 17 de octubre, por petición de la propia alcaldesa.
Ante ello, los partidos constitucionalistas, como Ciudadanos o el PP, han criticado que la munícipe se "haya plegado" de nuevo a los intereses y agenda del independentismo.