A por todas en una situación límite. Esa es la apuesta de Carles Puigdemont, que ha dejado descolocados a muchos dirigentes de Junts per Catalunya y del PDeCAT, pero que ya negocia la diputada Laura Borràs. Y todo a espaldas de Artur Mas, que no sabe dónde esconderse. Puigdemont ha lanzado el órdago: una lista de Junts per Catalunya (JxCat) con el Front Republicà de Albano Dante Fachín, buscando, con ello, una presión total a Esquerra Republicana. Esa lista se presentaría para las elecciones generales del 10 de noviembre, con el argumento de que la "represión del Estado", con las detenciones de CDR, "obligan a una respuesta contundente".
Puigdemont se reunió este lunes con Artur Mas en Waterloo. Mas regresó a Barcelona muy enojado. Su intención de ejercer de puente entre el mundo de Puigdemont y el PDeCAT comienza a resultar imposible. Por ello, Mas aseguró en TV3 que lo único realista, tal vez, sea una coalición entre Junts per Catalunya y la Crida, el partido que registró Puigdemont. Pero todo el poder lo quiere el vecino de Waterloo que, sin decirle nada a Mas, ha buscado una opción que engarza en su idea aventurada de la política: un frente unitario de todo el independentismo para las elecciones del 10 de noviembre.
Dos días en TV3
¿Con quién? Los hilos se han ido estableciendo en los últimos días. El activista Albano Dante Fachín, que se presentó en las elecciones del 28 de abril como líder del Front Republicà, una idea que surgió de una parte de la CUP, difundía su nuevo proyecto unitario para el 10 de noviembre en una entrevista en el programa FAQS de TV3. Eso fue el sábado. Este lunes volvía a formular su propuesta en el programa Tot es Mou de TV3. ¿Casualidad?
Puigdemont apuesta por esa lista con Dante Fachín, a pesar de que para una organización como el PDeCAT es como el día y la noche. Dante Fachín, antaño furibundo anticonvergente, con críticas ácidas y contundentes en su etapa como periodista en la revista Cafè amb llet, irá en las mismas listas que convergentes clásicos como Ferran Bel. Y con una formación, Front Republicà, que proviene de una facción de la CUP, la misma que lanzó a la “papelera de la historia” a Artur Mas.
El entusiasmo de la Crida
Laura Borràs se ha mostrado “entusiasmada”, según las fuentes consultadas, y ya busca cómo implementar el deseo de Puigdemont. En paralelo, la Crida per la República, el partido de Puigdemont, ha mostrado su apoyo a la idea: “Albano Dante Fachín expresa exactamente la grandeza de la estrategia unitaria que hemos reclamado siempre desde la Crida. No podemos hacer otra cosa que sumarnos a su petición y ponernos a disposición de esta estrategia para lo que sea necesario”, señala la formacióin que dirige Toni Morral.
¿La estrategia? Lograr esa lista unitaria, que uniría, en la práctica, un conglomoerado de exconvergentes, oportunistas, ácratas y cupaires, con los políticos presos al frente, como Jordi Sànchez. Quedan unos días para concretarlo todo. La voluntad, en todo caso, es lograrlo.
Mas, en un rincón
Con ello se presionaría a Esquerra Republicana, que insiste en mantener una estrategia distinta, orientada a pasar página de la vía unilateral que se impulsó en octubre de 2017, con resultados descriptibles.
¿Y Artur Mas? Enojado y “alucinado” con quien, él mismo, situó al frente de la Generalitat.