Cataluña ha reanudado su curso parlamentario con la incertidumbre de si se convocarán elecciones. La sentencia del Tribunal Supremo sobre el referéndum del 1-O- prevista para la primera quincena de octubre—será un punto de inflexión del procés que permitirá calibrar el músculo social de Junts per Catalunya y ERC--. La última palabra la tiene Quim Torra –en realidad Carles Puigdemont--, pero tampoco parece que los republicanos quieran adelantar acontecimientos. Uno de los motivos que se aducen, tanto a nivel social como parlamentario, para demorar ese adelanto electoral es el gran número de altos cargos que hay en juego.
¿Realmente es tan masiva esa cifra? Los datos de la Generalitat demuestran que sí, pues la Generalitat y sus empresas satélites tienen 501 altos cargos con sueldos que, en 53 casos, rebasan los 100.000 euros al año. La mayoría de estas generosas retribuciones, que se pueden consultar en este enlace, son recibidas por directivos de entidades dependentistes de la Generalitat. Especialmente llamativo es el caso de los altos cargos de la sanidad catalana, cuyos salarios son los más altos de todo el entramado de la administración.
Aunque los sucesivos gobiernos catalanes han ido reduciendo su faraónica estructura –simplificar la estructura organizativa de la Generalitat es una promesa electoral común a todos los partidos, especialmente en época de crisis económica--, lo cierto es que la cifra de entidades públicas sigue siendo elevada. A las 13 consejerías del Govern, con sus correspondientes secretarías, direcciones generales y delegaciones territoriales, se añaden un largo listado de empresas, un total de 191. Asimismo, los ocho "embajadores" de la Generalitat en el extranjero tienen el suelo equiparado al de un director general, 85.741 euros.
Un total de 53 cargos con sueldos 'cienmileuristas'
A saber: entidades autónomas (2), entidades de derecho público (45), sociedades mercantiles (28), consorcios (62) y fundaciones (34). Pero es que, además, los socios del Govern han incumplido sus propios acuerdos. En 2013, CiU y ERC pactaron que un alto cargo de la Generalitat no podía superar el sueldo de un consejero, que entonces ascendía a 109.663 euros. Desde entonces, las retribuciones de los miembros del Consell Executiu han ido subiendo, pero también los de directivos de empresas, colectivo donde siempre se incumplió esa medida racionalizadora.
Actualmente, un total de 53 cargos reciben sueldos superiores a los 100.000 euros. Se incluyen en este paquete al presidente Quim Torra, que cobra 153.235 euros –el más alto de España, pues el presidente Pedro Sánchez cobra 82.979 euros anuales--, y a los doce consejeros de su gobierno –que reciben 115.512 euros—. A destacar los sueldos de los responsables de las oficinas de los expresidentes, que cobran 103.602 euros.
Altos sueldos en Territorio y Salud ¿para evitar corruptelas?
Se da la circunstancia de que la mayoría de esos sueldos cienmileuristas se dan en las empresas satélites, donde 32 cargos superan esa cifra. En algunos casos con creces, especialmente en las sociedades que dependen de las consejerías de Salud y Territorio.
“Son los departamentos que gestionan un volumen mayor de contratos públicos, de ahí que se necesiten responsables con buenos sueldos para evitar tentaciones y corruptelas”, explican fuentes oficiales. Asimismo, algunos de esos directivos acumulan cargos, es decir, que la Generalitat se ahorra en el doble sueldo que, por ejemplo, supondría pagar al presidente y al director de una empresa pública determinada.
En cambio, desde la oposición política se consideran desmesuradas la retribuciones en un sector sanitario con problemas de lista de espera y precariedad laboral.
Llamativa resulta la cifra que cobra la gerente del Consorci Mar Parc de Salut de Barcelona, Olga Pané, 126.270 euros, mientras que el director/gerente de la Fundació de Gestió Sanitaria del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, Albert Salazar, recibe 120.003 euros. Un total de 13 cargos sanitarios superan esa mítica cifra de 100.000 euros anuales, según los datos de la propia Generalitat.
Y si en Presidencia destacan los sueldos de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) –los de los directores de TV3 y Catalunya no bajan de los 109.000 euros--, la retribución más alta de un cargo de empresa pública corresponde al director de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), Pere Calvet, nada menos que 146.977 euros, mientras que el presidente de esta entidad, Ricard Font, cobra 135.237 euros.