Cataluña, de nuevo, en el eje de la política nacional. La celebración de la Diada ha coincidido con el primer acto parlamentario del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, quien ha asegurado que su Ejecutivo y el PSOE trabajan y seguirán haciéndolo para que "pronto" llegue el día en el que el 11 de septiembre en Cataluña se convierta en "la fiesta de todos los catalanes y catalanas".
El dirigente socialista ha comparecido en el Pleno del Congreso para dar explicaciones sobre la participación de España en las últimas cumbres europeas sobre el Brexit, así como para someterse al control de la oposición. Lo hace en plenas negociaciones sobre su investidura entre PSOE y Unidas Podemos, hasta ahora aparentemente infructuosas.
Sánchez ha lanzado varios mensajes dirigidos a determinados colectivos, entre ellos a los catalanes, en el día de la fiesta autonómica, convertida en los últimos años en una jornada de reivindicación independentista.
Pero el jefe del Ejecutivo también ha querido emitir un mensaje feminista, reclamando que los socialistas quieren a las mujeres "libres y vivas" y ratificando su compromiso para combatir la "lacra" que representa la violencia machista, que deja ya 40 mujeres asesinadas en lo que va de 2019.
También se ha solidarizado con los españoles afectados por los incendios del verano y ha elogiado la labor de los bomberos y cuerpos de seguridad que luchan contra el fuego, en ocasiones jugándose la vida. Sánchez ha hecho una mención especial a los damnificados por el incendio de Gran Canaria, cuya 'zona cero' sobrevoló en agosto pasado.