El dispositivo Toga, destinado a blindar las sedes judiciales contra el ataque de los CDR, destina a casi 400 agentes de los Mossos d’Esquadra desde hace casi siete meses. El operativo supone el despliegue de una pareja de la policía autonómica durante 24 horas frente a los edificios del ramo.

El número de agentes, del que informa La Vanguardia, supone una merma de efectivos en las calles en plena crisis de inseguridad en Barcelona. De hecho, los sindicatos policiales citados por el mismo medio consideran que se trata de una cantidad desproporcionada.

El TSJC no ha recibido petición de cambio

No obstante, el TSJC, que decretó la medida por los ataques a causa del enjuiciamiento de los líderes independentistas, asegura que no ha recibido ninguna petición de los Mossos para modificar el operativo.

El conseller de Interior, Miquel Buch, ya manifestó en una entrevista con Rac1 el pasado lunes que los Mossos deberían estar en las calles “evitando hechos delictivos que no vigilando piedras”. Sin embargo, este aseguraba que no cuestionaría la orden del TSJC.

Asimismo, son las comisarias más pequeñas las que sufren una mayor merma. En muchas ocasiones se destina hasta el 50% de los agentes a la vigilancia de los juzgados. Así, se han dado casos, según fuentes citadas por el diario, en los que los Mossos no han podido asistir ante el aviso de altercados en otros puntos por falta de efectivos.