Sánchez Costa: “El acuerdo de la Diputación de BCN favorece la convivencia”

Un cambio de rumbo, forzado por las circunstancias, pero también por la convicción de que la sociedad catalana necesita pasar página. Es lo que plantea el nuevo presidente de Societat Civil Catalana, Fernando Sánchez Costa, que tiene claro que algunos de los acuerdos que se han producido pueden ofrecer una buena señal. “El acuerdo de la Diputación de Barcelona es de los que favorecen la convivencia, son pactos locales que pueden contribuir a mejorar la situación”, señala.

Sánchez Costa quiere que la entidad, que inicia una nueva etapa, tras la presidencia de Josep Ramon Bosch, se constituya en la “casa grande del constitucionalismo”, con el recuerdo de lo que ocurrió el 8 de octubre de 2017. Se trató de la principal manifestación del constitucionalismo, con el apoyo del PP, PSC y Ciudadanos.

La casa grande del constitucionalismo

En ese aspecto, Sánchez Costa, en una entrevista en el programa Converses, de la Cadena Cope, con la participación de Crónica Global, admite que esa alianza del constitucionalismo ya no es la misma. “El PP está comprometido, y también el PSC, pero Ciudadanos, es cierto que ha reconsiderado algo su posición, pero espero que se pueda mantener la colaboración, porque ha sido positivo”, ha añadido.

Pero la necesidad de abrir una nueva etapa, puede llegar con esos acuerdos entre bloques, como ha ocurrido en la Diputación de Barcelona. El presidente de Societat Civil Catalana considera que el acuerdo entre Junts per Catalunya y PSC, en el nivel local de un órgano como la Diputación, “no es un mal acuerdo y contribuye a la convivencia”.

Actuar sobre los derechos civiles

Con un mandato explícito, Sánchez Costa reclama un mayor esfuerzo del constitucionalismo, “de los empresarios y de los que puedan contribuir, con sus aportaciones, cada uno según sus posibilidades, porque a veces la propia burguesía no ha aportado dinero, tal vez por un cierto miedo”, para hacer de SCC una entidad más influyente, con más recursos y con más socios. El objetivo es “actuar en diferentes ámbitos, como el educativo, con observatorios sobre derechos civiles, o sobre las consecuencias económicas del procés para “mejorar las relaciones en la sociedad catalana”. Porque, según Sánchez Costa, Cataluña "es de las sociedades que menos refleja públicamente su pluralidad interna y hay que hacer un gran esfuerzo sobre eso".

Lo que reclama Sánchez Costa es una entidad que pueda poner “las luces largas”, y, por tanto, el modelo de Societat Civil Catalana, a su juicio, debe ser “más el de Òmnium que el de la ANC”, trabajando "a largo plazo".

¿Cómo superar al independentismo?

La entidad ha querido organizar para la Diada un espectáculo histórico sobre la recreación de los hechos de 1714, en Sant Boi, centrado en la figura de Rafael Casanova, que fue ‘conseller en cap” en Barcelona, herido en la Guerra de Sucesión. No se tratará de algo irónico o con un carácter más festivo, sino una recreación histórica con rigor con la idea de “mostrar los hechos que sucedieron”, sin las interpretaciones que han hecho los nacionalistas.

Societat Civil Catalana estará preparada para nuevas movilizaciones en la calle, si el independentismo vuelve a apostar por la vía unilateral, pero ese no será el principal objetivo. Según Sánchez Costa, la idea es “reconectar Cataluña con España”. En ese sentido, entiende, de forma personal, que el partido de la Lliga Democràtica, que impulsa, precisamente, Josep Ramon Bosch, junto a Eva Parera, para tener éxito “debería contar con una reivindicación importante de la identidad catalana, que fuera compatible con España”. A su juicio, un partido de esas características debería incidir en el bloque independentista, para atraer a su parte más moderada, y no competir con PP y Ciudadanos.