Jordi Cañas ha vuelto y por la puerta grande. Tras un paréntesis de cinco años, acaba de ser elegido eurodiputado de Ciudadanos. Se define como un animal político. “Yo nunca he sido una persona institucionalizada. Para mí, la política es una forma de entender la vida”. Y se la toma muy en serio. De ahí que, en una entrevista en el programa Converses de COPE Catalunya, lamente la “prepolítica” o “metapolítica” que se practica en Cataluña.
“La política requiere de formas de incidir en la vida pública con la base del respeto a la ley. Solo se puede desarrollar con normas de juego que todos debemos respetar. Pero en Cataluña, lo que más lamento es la ruptura de la confianza. Será lo más difícil de restituir. ¿Cómo se puede confiar en alguien que dice que ‘lo volveré’ a hacer?”, en referencia al lema de los independentistas. En este sentido, afirma que se trata de “una de las cosas más pornográficas y obscenas que he visto en política”. Sentencia que “la independencia no la han conseguido, pero la decadencia sí”, aunque “estamos infinitamente peor que hace cinco años”.
También critica la metapolítica “porque se basa en los sentimientos, cuando la política es algo pragmático”.
La ruptura del principio de neutralidad institucional
Cañas advierte de que “se ha roto el principio de neutralidad institucional. Cuando un funcionario se posiciona y se enfrenta a la mitad de los ciudadanos, hay que replantearse en concepto de función pública”. Respecto a la politización de los Mossos d’Esquadra, se muestra partidario de aplicar la Ley de Seguridad Nacional para que este cuerpo pase a depender del Ministerio de Interior. “Ya debió ser así en los días 6 y 7 de septiembre”, cuando se aprobaron en el Parlament las leyes de ruptura.
El dirigente de Ciudadanos se muestra muy crítico con Pedro Sánchez y defiende la resistencia del líder de su partido, Albert Rivera, a apoyar su investidura. “En 2015, Sánchez era un fenómeno político, un outsider; ofrecía un perfil comprometido y nuevo. Pero el tiempo demuestra quienes somos. No sé si tiene convicciones, pero sus ambiciones son superiores y hace de la acción política, pura propaganda".