Seis años de cárcel. Ese es el castigo que pide el fiscal para el activista Lluís M. E. por lanzar una botella de cristal contra el cordón policial y cruzar contenedores en la calle durante la manifestación que tuvo lugar en Barcelona en protesta por la detención de Carles Puigdemont en Alemania en marzo.
En concreto, el fiscal solicita esta pena para Lluís por los delitos de atentado a la autoridad y desórdenes públicos. Para su mujer, Eulàlia R. P., pide dos años de cárcel por desórdenes. Ambos niegan las acusaciones, y afirman que la manifestación transcurrió en un ambiente pacífico. En cambio, los agentes de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Urbana citados como testigos corroboran la versión de la Fiscalía.
Una botella de cristal contra una furgoneta policial
Según la Fiscalía, los dos acusados provocaron incidentes en la concentración que se convocó por las redes sociales el 25 de marzo de 2018 en Barcelona, horas después de que la policía alemana detuviera al expresidente Puigdemont, sobre quien pesaba una orden internacional de extradición por un delito de rebelión por su papel en el proceso unilateral a la independencia.
En la concentración, que reunió a unas 3.000 personas frente a la Subdelegación del Gobierno en Barcelona, Lluís supuestamente lanzó una botella de cristal contra un cordón policial, que si bien no impactó contra ningún agente sí alcanzó a una de las furgonetas de la policía. Y, para alterar el orden y dificultar el paso de los vehículos antidisturbios, cortó la calle València cruzando un contenedor de basura. Repitió la acción en la calle Pau Claris, ayudado por Eulàlia.
Visto para sentencia
Ante esta situación, sostiene la Fiscalía, los agentes de los Mossos d'Esquadra se vieron obligados a efectuar cargas con sus porras y lanzar salvas para garantizar su posición, dado que algunos de los concentrados arrojaron artefactos incendiarios, pinturas, basura y objetos contundentes y levantaron barricadas frente a la Subdelegación del Gobierno.
El juicio, celebrado en la Audiencia de Barcelona, ha quedado visto para sentencia.