Derrota de envergadura. Una pieza fundamental en el esquema de Ciudadanos deja el partido, disgustado por el giro a la derecha. Se trata de Toni Roldán, portavoz de Economía del grupo parlamentario de Ciudadanos en el Congreso. Tal y como anunció Crónica Global en exclusiva, Roldán deja su puesto, al no entender el cordón sanitario a Pedro Sánchez, por parte de Albert Rivera, y los acuerdos suscritos con el PP y Vox en ayuntamientos y comunidades autónomas. La duda de Roldán, sobre cuándo hacer efectiva su salida, la ha resuelto este lunes, al comunicar su decisión a Rivera y José Manuel Villegas, el secretario de organización de Ciudadanos. Él mismo dará cuenta de sus argumentos este mismo lunes ante los medios de comunicación.
La salida de Roldán es significativa, porque se trata de la mano derecha de Luis Garicano, el economista que encabezó las listas europeas de Ciudadanos. Garicano, que ha sido profesor y director de tesis de Roldán en la London School of Economics, lidera el sector crítico a Rivera, con la idea de que el partido debe seguir apostando por las reformas económicas y sociales, que caracterizaron a Ciudadanos hace solo tres años, y dejar de lado una estrategia que sólo persigue superar al PP en el campo de la derecha, cerrando las puertas a acuerdos con el PSOE.
El caso de Castilla y León
Una de las gotas que han colmado el vaso es la decisión unilateral de Rivera de forzar un acuerdo en Castilla y León con el PP, dejando en la estacada al PSOE, que ganó de forma amplia las elecciones. Garicano había apostado personalmente por ese acuerdo, con su candidato en aquella autonomía, Francisco Igea.
Cuando a Rivera se le ha preguntado en las últimas semanas por las críticas internas, ha señalado que se trata de voces sin responsabilidades en el partido. Y que los intelectuales que ayudaron a constituirlo, como Francesc de Carreras, ya no están en la primera línea.
El espíritu reformista, en la estacada
Pero ahora se trata de Toni Roldán, que había sido una de las apuestas de Rivera: un economista reformista, partidario, entre otras medidas, de la mochila austriaca, para resolver el problema de las pensiones, joven, con empuje, que ha sido, de hecho, apartado en los últimos meses.
Rivera ha dejado de lado sus apuestas anteriores, y se ha basado en otros dirigentes, como el exdirectivo de Coca-Cola, Marcos de Quinto. El hecho es que uno de los alfiles de Ciudadanos, amigo personal de Garicano, deja su escaño y sus labores en el partido, una auténtica llamada de atención a Rivera.