El PP ha logrado mantener los dos concejales por Barcelona que le otorgó el recuento provisional del domingo después del escrutinio definitivo realizado este miércoles por la junta electoral de zona.

El recuento definitivo --aunque todavía es susceptible de ser impugnado ante la junta electoral central-- ha dejado la composición del pleno municipal sin alteraciones: diez ediles para ERC; diez para BComú; ocho para el PSC; seis para BCN Canvi-Cs; cinco para JxCat, y dos para el PP.

111 votos 'sobrantes'

Los regidores populares --Josep Bou y Óscar Ramírez-- estaban en riesgo de no entrar en el consistorio porque, a falta de contabilizar los votos de los residentes en el extranjero y de las posibles impugnaciones, el partido había obtenido un 5,01% de los sufragios (37.745 votos), cuando el mínimo electoral para conseguir representación se sitúa en el 5%.

Esto les daba un margen de 45 votos únicamente. Sin embargo, tras añadir los votos de los residentes ausentes y revisar las papeletas impugnadas, los populares han cerrado el recuento con 111 votos por encima del corte del 5%.

Tensión entre ERC y PP

El recuento de las 1.434 mesas electorales, que ha durado todo el día, ha vivido momentos de tensión, especialmente entre los interventores de ERC y los del PP. Los primeros --que, junto al PSC, habrían sido los beneficiarios de la pérdida de los ediles populares-- han puesto todo tipo de pegas durante el escrutinio.

Según revela El Mundo, los representantes de ERC han llegado a reclamar a la junta --con éxito-- que considerase como válidos votos de Cs y Vox que se habían declarado inicialmente nulos, para así elevar el número de sufragios válidos y, por tanto, el listón del 5% que podía dejar fuera a los populares.