Contra lo que decían los agoreros, Vox no ha tenido un gran papel en las elecciones europeas. Ha obtenido tres diputados, pero no ha sido ningún éxito, sobre todo si se tiene en cuenta que frente a los 2.677.173 votos que obtuvo en las elecciones generales de hace un mes, ahora ha obtenido prácticamente la mitad, no llega a 1,4 millones.
En el conjunto de la Unión Europea, con una participación récord del 51%, los grupos eurófobos y de ultraderecha tampoco han dado el salto que tantos temían, más allá de que en términos de política interior algunos partidos, como el de Marine Le Pen o de Matteo Salvini, puedan presentar batalla y capitalizar sus resultados.
Adios al bipartidismo
El bipartidismo europeo está de capa caída. El Partido Popular Europeo (PPE) ha ganado las elecciones con 173 escaños, a pesar de haber perdido 44 representantes, seguido del grupo de los Socialistas y Demócratas (S&D), que también perdería 40 eurodiputados, según la primera proyección ofrecida por la Eurocámara.
La Alianza de Liberales y Demócratas (ALDE) recupera el puesto de tercera fuerza de la institución comunitaria al aumentar el tamaño de su grupo desde los 68 escaños a los 102. Esta proyección incluye a los representantes de Renaissance, la lista de Emmanuel Macron, tal y como ha pedido la familia liberal antes de conocerse los primeros resultados provisionales.
El papel de Los Verdes
Tras ellos se situarían Los Verdes (71), los Conservadores y Reformistas Europeos (58), el grupo Europa de las Naciones y de las Libertades (57) --del que forma parte el UKIP británico y la Liga de Matteo Salvini--, el grupo Europa de la Libertad y de la Democracia Directa (56) --en el que se inscribe la ultraderecha francesa de Marine Le Pen--, la Izquierda Unitaria Europea (42) y otros (37).
Con estos resultados se confirmaría, por una parte, que los populares y los socialistas perderían el control de la Eurocámara y necesitarían a la familia liberal para ser capaces de forjar acuerdos con un número suficiente de eurodiputados. En concreto, los tres mayores grupos del hemiciclo agruparían a 422 representantes.
Tampoco alcanzaría una mayoría absoluta una eventual coalición entre socialdemócratas, liberales, ecologistas e izquierda, como ha propuesto el cabeza de lista de los primeros, Frans Timmermans, para controlar la Cámara al margen del PPE. Esta suma se quedaría en los 362, a 14 escaños de la mayoría absoluta de 376.
Sin posibilidad de bloqueo
Por otra parte, la ultraderecha no consigue la fuerza de bloqueo de la Cámara, puesto que, aun en el caso de que se pusieran de acuerdo alcanzarían los 114 diputados. Algunos de los grupos que la componen han ofrecido a Vox sumarse a esta alianza, si bien el partido español no ha decidido aún su estrategia de alianzas.
A la luz de estas estimaciones, tanto Liberales como Verdes han reivindicado un papel decisivo para formar mayorías estables en el nuevo Parlamento Europeo y han hecho valer su peso en las negociaciones que se abrirán ahora para decidir quién sucederá al Jean-Claude Juncker al frente de la Comisión Europea.
El PSOE recupera el liderazgo
En España el viento de cola que empuja al PSOE se ha mantenido en las elecciones europeas y ha vuelto a ponerse por delante del PP. Ha ganado seis escaños, hasta los 20, mientras que el partido de Pablo Casado ha perdido los mismos diputados, y se ha quedado con 12.
En términos de Europarlamento, Ciudadanos no ha dado el sorpasso al PP, pero el partido de Albert Rivera mantiene su camino ascendente y gana cinco diputados: pasa de dos a siete.
La suerte de Unidas Podemos, que gana un escaño respecto a los resultados de 2014, y obtiene seis, también sigue el guión que habían dibujado las encuestas en el sentido de que parece haber tocado techo.