Es Jordi Fàbrega, pediatra, director asistencial del Hospital de la Seu d’Urgell, candidato a la alcaldía por Junts per Catalunya, el partido de Carles Puigdemont. Sus intervenciones en las redes sociales han alarmado al partido, a los cuadros del PDeCAT, que no entienden los excesos de Fàbrega, aunque no es el único. “Son ellos, los que llevan la violencia en los genes. Es Castilla, toda su historia es luchar, nunca han negociado nada, siempre a la fuerza”, señala en un mensaje reciente en su cuenta de Twitter, que se une a otros comentarios en redes sociales.
Ese mensaje está instalado en las mentes de muchos dirigentes del partido de Puigdemont. También lo señaló el dirigente de Democràtes, Antoni Castella, que sigue en las filas de Esquerra Republicana como diputado. Es la idea de que “los españoles” no negocian, sino que luchan con sus armas. Se sigue identificando España con Castilla, con un lenguaje historicista, que tiene en la fecha del 11 de septiembre de 1714 el gran momento en el que la Cataluña soñada pierde sus instituciones de autogobierno. Y ha mantenido esa línea Núria de Gispert, que ha tenido que renunciar a la Creu de Sant Jordi tras las polémicas que ha protagonizado.
Insultos a Ciudadanos
Fàbrega ha sido sorprendido en el Hospital, donde trabaja, por estar conectado con el móvil constantemente, difundiendo mensajes en las redes sociales, aunque los trabajadores tienen restringido su uso, como explica el digital La Valira. Muchos mensajes se han borrado, pero algunos usuarios los han guardado y los difunden, como el que emitió sobre la “violencia” de los españoles.
El candidato de Junts per Catalunya en la Seu d’Urgell, que sustituye a Albert Batalla, que renunció a ser de nuevo alcaldable, ha tilado de “fascista” a Ciudadanos, y se ha expresado en términos bélicos sobre el Gobierno español, en relación a lo que ocurrió el 1 de octubre de 2017.