Una mujer tiene que prostituirse en la calle / EFE

Una mujer tiene que prostituirse en la calle / EFE

Política

La prensa italiana alerta sobre la Barcelona de Colau: "Droga y prostitución"

El diario económico 'Il Sole 24 Ore' describe un paisaje desolador de la capital catalana, en el que la criminalidad campa a sus anchas gracias al populismo del gobierno municipal

16 mayo, 2019 01:17

Un artículo publicado en el diario económico italiano Il Sole 24 Ore alerta sobre la inseguridad en la ciudad de Barcelona, destacando su alto índice de criminalidad, el elevado número de agresiones sexuales y el aumento del narcotráfico y la prostitución.

El texto, firmado por Antonino Vaccaro, profesor agregado del departamento de Ética Empresarial y de la Unidad de Negociación de IESE Business School, es muy crítico con la gestión de la alcaldesa, Ada Colau, a la que responsabiliza del deterioro de la urbe.

"Crimen organizado"

"Barcelona, la ciudad de los sueños: hermosa, cosmopolita, brillante, cultural, abierta al mar, a la diversión y, sobre todo, al bullicio. La versión moderna de la antigua Barcino ofrece una variedad casi infinita de experiencias para turistas, residentes y visitantes de todo tipo. Incluidos los preparados por el crimen organizado", comienza el artículo.

Vaccaro asegura que "la creciente sensación de inseguridad es palpable en la ciudad", muestra de "las numerosas y trágicas evidencias de una España poco conocida".

Robos a mano armada y agresiones sexuales

La pieza destaca algunos datos demoledores para apoyar su denuncia: en los tres primeros trimestres de 2018, los crímenes crecieron un 17,5%. "No está mal para una ciudad cuya alcaldesa, Ada Colau, se propone a sí misma como un ejemplo europeo de liderazgo metropolitano", apostilla.

También recuerda que en esos primeros nueve meses de 2018, en la ciudad se denunciaron 144.024 delitos, incluyendo 81.784 carteristas, 8.669 robos a mano armada o con violencia y 107 agresiones sexuales.

Delincuencia disparada

La columna subraya que "hay áreas enteras de la zona alta, residenciales, como Vallvidrera, que han sido saqueadas por grupos del crimen organizado con impunidad".

"En 2014, Barcelona mostró niveles de delincuencia en línea con los niveles nacionales. En los últimos cuatro años, la capital catalana ha aumentado su nivel de delincuencia en comparación con la media nacional española, alcanzando un pico diferencial del 20,9% en el primer trimestre de 2018", añade.

"Economía criminal"

Vaccaro advierte sobre "la propagación de la economía criminal", en referencia a las drogas y la prostitución, que califica como "dos componentes clave de un turismo malsano que cuenta mucho, demasiado, en la vida de la ciudad".

"Pero tenga cuidado. No se deje impresionar por las apariencias. Los pocos narcotraficantes que se encontrarán en la calle ciertamente no son representativos, ni remotamente, de la floreciente actividad comercial que gira en torno a las drogas. En estas partes, lo importante es lucir limpio y ordenado, el resto, la sustancia, es irrelevante", lamenta. Y recuerda que en 2018 se identificaron 71 narcopisos en el Raval, donde se traficaba con heroína y cocaína --además de señalar que "la permisividad de la marihuana aquí alcanza los niveles de Jamaica en la década de 1970"-- que, tras las redadas, volvieron a actuar como antes.

Un gran burdel

En relación a la prostitución, el artículo apunta que "Barcelona está llena de clubes luminiscentes que sirven a residentes, turistas y hombres de negocios de todo el mundo".

Así, los "eventos internacionales en los que la capital catalana es tan apreciada" --entre los que destaca el Mobile World Congress (MWC)-- "solo son la parte visible de una economía subterránea extremadamente eficiente, formada por vuelos chárter para prostitutas que llegan desde Europa del Este y una red de explotadores, apartamentos, clubes, plataformas digitales y demás".

"Los resultados del populismo"

El texto señala que "el bullicio en Barcelona es ahora un servicio integrado en el que lo legal y lo ilegal cooperan a la perfección". Y pone como ejemplo las "listas de casas cerradas utilizadas por las compañías de taxis para asesorar a los clientes", lo que les proporciona a los taxistas unas comisiones de entre el 10% y el 15% de lo que los clientes consuman en los clubes, "incluidos el alcohol, las drogas y la prostitución".

Para concluir, Vaccaro indica que "es difícil ser comprensivo con un gobierno municipal involucrado en un programa completamente retórico y de aproximación". Y muestra su preocupación por el hecho de que "una hermosa ciudad ahora emprende un camino que alimenta la economía de la ilegalidad". "Estos son los resultados del populismo de nuestros tiempos", remata.