El concejal de ERC en Sant Joan de Vilatorrada y miembro de Payasos sin fronteras, Jordi Pesarrodona, ha explicado este martes ante el Tribunal Supremo su experiencia durante el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 así como su actuación ante la Consellería de Economía del 20 de septiembre de ese mismo año. "No lo olvidaré en la vida”, ha dicho sobre las cargas policiales que se produjeron esa jornada por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
Pesarrodona ha narrado que recibió hasta cuatro golpes de porra en la zona de los “testículos” y que si el primero le dolió enormemente y no se explica el motivo de esos porrazos, el resto tuvieron menos impacto por la curvatura del cuerpo ante los golpes y por la “grasa” de su constitución física, que paliaba el efecto de las porras. "Denuncié la agresión creía que el ataque había sido innecesario e increíble. Uno de los grandes lesionados del referéndum estuvo en el colegio donde yo voté. Él protegió una puerta lateral. Me iba hacia la ambulancia y recuerdo los golpes que daban con un ariete a la puerta”, ha abundado.
También ha dado su testimonio de cómo le “arrastraron por el suelo” y le “golpearon en los testículos”.
Nariz de payaso en el 20S
El también edil de ERC ha asegurado que fue víctima de las cargas policiales al ser reconocido: “El oficial del operativo me había reconocido de la anterior protesta y me dijo 'Ven aquí, famosito'". La anterior protesta a la que se refiere fue la que tuvo lugar ante el Departamento de Economía durante el 20S. Pesarrodona se puso en actitud de resistencia pasiva ante la puerta del edificio público y con una nariz de payaso.
"Soy miembro de Payasos sin fronteras. Utilizamos la nariz de payaso como protesta cuando hay cualquier tipo de conflicto. Me situé al lado de los Guardias Civiles. Quería sacar transcendencia a ese sentido de ocupación, y me quedé plantado durante el registro. Después de tres horas el operativo se disipó”, ha justificado.
El edil de Sant Joan de Vilatorrada fue denunciado por la Guardia Civil por un presunto delito de odio por su actuación durante el 20S con la nariz de comediante, pero el juez finalmente descartó que se incurriera en este tipo de delito. En la actualidad, Pesarrodona está investigado por un delito de desobediencia grave por su presunta implicación en el 1-O.