La expresidenta del Parlamento de Cataluña Núria de Gispert se queda sin su polémica Creu de Sant Jordi. El Govern, a través de su portavoz, Meritxell Budó, acepta su renuncia, comunicada mediante carta minutos antes.
De Gispert, portavoz de Demòcrates (la escisión independentista de Unió), asume "el error cometido" en las redes sociales, donde en los últimos tiempos ha cargado con muy mal gusto (y tintes xenófobos) contra sus rivales políticos. Especialmente contra algunos integrantes de Cs y PP, a quienes en una de sus últimas intevenciones virtuales ha comparado con cerdos.
El Govern, agradecido
Ante tales manifestaciones, y ante el revuelo generado por este galardón, la misma De Gispert ponía la Creu de Sant Jordi a disposición del presidente catalán, Quim Torra, "para lo que crea más conveniente". El Govern, por medio de Budó, ha respondido en Twitter que este gesto la "honra" y "avala su trayectoria de compromiso con las instituciones de Cataluña". "Agradece" esta decisión.
En su carta de renuncia, que ha remitido al Govern y a algunos diarios, y a pesar de que asume su error, De Gispert acusa a "medios de comunicación, líneas editoriales y opinadores de toda clase" de crear "un ambiente proclive" a que le retiren el galardón a "consecuencia de un maldito tuit".
"Libertad de expresión"
"Se tergiversó lo que yo había escrito, y se silenciaron mis explicaciones. Tampoco pareció importar que me haya disculpado por el tuit, que reconocí, era desafortunado. Ni que lo hubiese borrado, al ver las interpretaciones que se estaban difundiendo", ha intentado justificar. "El mal ya estaba hecho", continúa de Gispert, tratando de buscar otros responsables a sus actos. "Los profesionales de la crispación no estaban dispuestos a desaprovechar la situación planteada", lamenta en la misiva. No podía faltar una alusión a la "libertad de expresión".
Cabe recordar que el Parlament, que presidió entre 2010 y 2015, la reprobó hace unos meses por algunos de sus polémicos tuits. Con todo, Torra ha mantenido hasta el final que De Gispert merecía este galardón, si bien algunos dirigentes de ERC, como Pere Aragonès y Roger Torrent, han criticado la actitud de esta mujer.