El líder del PP, Pablo Casado, quiere rectificar cuanto antes el discurso del PP, de cara a las elecciones municipales y autonómicas del 26 de mayo. Se trata de “volver al centro”, con un lema que, con algunas diferencias, había utilizado Mariano Rajoy: “Centrados en tu futuro”, clama Casado. Pero algunos de sus fichajes estrella consideran que eso es, ahora, un error. Es el caso de Cayetana Álvarez de Toledo, que ha querido plantear una enmienda a la totalidad, frente al proyecto de los nacionalistas en Cataluña.
Sus resultados han sido malos, sólo ella ha sido elegida como diputada, en la circunscripción de Barcelona. Su argumento, sin embargo, es claro: “No sé qué es esto de las vueltas al centro o las moderaciones. Defender al estado constitucional, defender la democracia, defender lo que hemos hecho juntos los españoles en 1978 y plantar cara al nacionalismo no es falta de moderación, creo, es simplemente llamar a las cosas por su nombre”.
"¿Vueltas al centro?"
Fue Casado quien apostó por ella. Los dos proceden de Faes, el think tank que impulsó José María Aznar, anclado, inicialmente, al PP, aunque ahora vuela solo. Sin embargo, el líder del PP necesita reorientar la estrategia después de la debacle electoral. Y busca recuperar posiciones en las elecciones del 26 de mayo. Álvarez de Toledo no lo ve claro, porque entiende que lo que está en juego es un debate estructural de fondo, a medio y largo plazo.
La única diputada del PP en Cataluña lo ha mostrado en una entrevista en la cadena Cope, con el periodista Carlos Herrera: “No sé qué es esto de las vueltas al centro o las moderaciones”, ha insistido.
Aznar, junto a Rajoy y Álvarez de Toledo, en una imagen reciente
Debates sofisticados en el PP
Su posición es firme, porque lo que se dirime, a su juicio, es un pulso político con el independentismo y los populismos, donde también incluye a Vox, que entiende que representa “un nacionalismo”, el español, en este caso. “Ahora hay todo tipo de debates muy sofisticados sobre lo que hay que hacer, y yo no me considero capaz de encontrar un rumbo que otros parece que sí”, ha considerado.
Álvarez de Toledo no se ha escondido. Tildó de “enorme varapalo” los resultados del PP, y, especialmente, en Cataluña, y asumió sus responsabilidades. En Cataluña el PP logró la mitad de votos que los obtenidos en las elecciones generales de 2016. Entonces, el PP consiguió 462.637 votos, por los 200.209 sufragios del pasado domingo. Eso se tradujo en una disminución de diputados, de seis a uno.
Reconstruir el centro-derecha
Pero, ¿qué plantea la diputada electa del PP? “Con unas elecciones a la vuelta de la esquina a las que se llega en una situación enormemente difícil, más que dar volantazos, se debería encontrar el ritmo y seguir con el plan de reconstrucción del espacio de centro-derecha”, ha remachado.
Para eso se precisa tiempo, y Casado no lo tiene, con la urgencia que plantea los nuevos comicios del 26 de mayo, en los que se juega el poder territorial del conjunto de España