El escrutinio oficial y definitivo de los resultados no se puede hackear, ni retrasar respecto a sus plazos habituales. Es un proceso manual y físico, que no se producirá durante la noche del día 28. De hecho, esa noche solo se realiza la recogida y difusión de los datos del escrutinio provisional.
La empresa que se va a encargar de dar soporte a la captura, transmisión, totalización y difusión de resultados provisionales y de carácter informativo en las elecciones generales es la española Indra. Los resultados provisionales no son vinculantes de cara a la proclamación de electos, tarea que es realizada por las juntas electorales, con base a las copias originales de las actas de escrutinio, según precisan fuentes conocedoras del proceso.
Urnas electorales / EFE
Una mera transmisión
La empresa encargada del soporte tecnológico de la captura, transmisión, y difusión de resultados provisionales no realiza el recuento de los votos. Lo hacen los miembros de mesa en el colegio electoral, bajo la supervisión de los interventores de los partidos políticos, coaliciones o agrupaciones que concurren a la elección.
Los datos de los resultados oficiales son procesados por las juntas electorales provinciales a partir de las actas presentadas físicamente en los juzgados por los presidentes de las mesas electorales en la noche de las elecciones. Los interventores de los partidos y los miembros de mesa garantizan la transparencia de la elección, ya que participan tanto en el recuento de los votos en la mesa, como en la elaboración y transporte de las actas hasta los juzgados. Los partidos también conservan copia de los resultados de todas las mesas hasta el escrutinio definitivo.
Tres días más tarde
Los expertos consultados recuerdan que el escrutinio general y definitivo se realiza por las juntas electorales entre el tercer y sexto día posterior a las elecciones, y es público. Se realiza mesa a mesa a partir de la documentación original de las mesas, en presencia de los representantes y apoderados de las candidaturas.
Los controles técnicos y humanos facilitan las máximas garantías en el escrutinio. En otras palabras, impiden que nadie pueda alterar los resultados electorales.
Miembros de una mesa electoral durante el recuento de votos / EFE
Conteo manual
Cada mesa electoral está compuesta por un presidente y dos vocales que son designados por sorteo público. Junto a ellos están presentes los interventores y apoderados de las formaciones políticas durante toda la jornada electoral, incluyendo el recuento de votos, en las mesas y en los colegios. Una vez abierta la urna tras el cierre de los colegios electorales, el presidente de la mesa extrae, uno a uno, los sobres, los abre, lee cada papeleta en voz alta y la muestra a vocales, interventores y apoderados de los partidos políticos.
Una vez realizado el conteo, el presidente anuncia el resultado en voz alta y traslada los datos a las actas de escrutinio, que son firmadas por el presidente, los dos vocales y los interventores de las candidaturas de los partidos políticos. Cada uno de ellos se queda con una copia, se coloca otra en la entrada del local electoral y se proporciona otra al representante de la Administración.
Interior se encarga de procesar
A continuación, el representante de la Administración transmite los datos telefónicamente o por medio de tablets al centro de recogida de información del Ministerio del Interior, desplegado por Indra en el marco de su contrato. Esta información se procesa en el Centro de Procesamiento de Datos (CPD) del mismo departamento y se va volcando en la página web de resultados provisionales creada para el proceso electoral, así como en el resto de soportes de difusión de resultados.
Las papeletas nulas y las que han sido objeto de reclamación solo se destruyen una vez se haya realizado el escrutinio definitivo.
El escrutinio general tiene lugar en las juntas electorales provinciales entre el tercer y sexto día posterior a las elecciones y es público. Se realiza mesa a mesa a partir de la documentación original de las mesas, en presencia de los representantes y apoderados de las candidaturas, quienes en caso de discrepancia pueden interponer reclamación.
Recuento independiente
La empresa encargada del soporte tecnológico a la captura, transmisión, y difusión de resultados provisionales no interviene en el recuento de los votos, que se realiza de forma pública en los colegios electorales con las garantías detalladas.
Imagen de una mesa electoral / EFE
La consolidación de resultados que realiza la empresa encargada del soporte tecnológico a la captura, transmisión, y difusión de resultados provisionales es de carácter informativo, no siendo vinculante de cara a la proclamación de electos, que es realizada por las Juntas Electorales con base a las copias originales de las actas de escrutinio.
Los datos provisionales
El proceso de recogida y difusión de los datos provisionales es diferente. Los resultados de las mesas electorales son entregados por el presidente de la mesa físicamente (una copia del acta de escrutinio) al representante de la Administración.
Este representante de la Administración transmite los datos de participación y el escrutinio por llamada telefónica o por tablet al Centro de Recogida de Información (CRI) del Ministerio del Interior. En el caso de transmisión telefónica, el profesional de la empresa encargada del soporte tecnológico a la captura, transmisión, y difusión de resultados provisionales introduce los datos en el sistema. Las tablets transmiten directamente al CRI los datos consignados por el representante.
La información recibida por ambos sistemas se va incorporando en el Centro de Proceso de Datos (CDP). Allí los datos se agregan por circunscripción, se realizan y actualizan los cálculos de diputados electos; y se distribuye la información a los diferentes canales de difusión de resultados, como página web, app, repositorio de medios (ficheros que los medios de comunicación pueden utilizar para sus informaciones o infografías).