“La responsabilidad de lo que ha pasado en Cataluña ha sido de los gobiernos de España, que han dejado a los niños mimados quemar la casa con los vecinos dentro”. El actor y dramaturgo Albert Boadella y la candidata del PP al Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, se han dado cita en una charla coloquio en la que han repasado el origen y la deriva del independentismo. Ambos han diseminado los “choques contra la realidad” y han vaticinado el “fin de la adolescencia del nacionalismo”. Pero también han sido críticos con la gestión política y las complicidades que, aseguran, se han tejido desde Madrid.

En un encuentro entre “dos amigos que se conocieron en la trinchera” del antiindependentismo  en el Philippines Club de Barcelona, Álvarez de Toledo y Boadella han copado la pequeña sala para instar al “rearme de la cultura, de los medios de comunicación y del mundo empresarial no nacionalista”. “La idea de que esto se va a resolver con unas elecciones o a golpe de decretazo central, no es verdad”, ha dicho Álvarez de Toledo, que ha asegurado que llevará “años” revertir la polarización política y social en Cataluña.

Catalanismo "xenofóbico"

Entre pinceladas cargadas de ironía y sarcasmo, Boadella ha hecho un repaso histórico del nacionalismo desde sus primeros pasos: “El catalanismo ya nace xenofóbico, surge como algo en lo que nosotros somos mejores que los vecinos. Ya se miraba a España como una cosa cutre, menos higiénica, menos culta y, sobre todo, más pobre”. A este respecto, el dramaturgo ha criticado que durante la Transición “se pensaba que había que restituir a Cataluña, olvidando lo que hicieron sus instituciones a la república”.

“¿Cataluña víctima del franquismo? Entonces Almería qué debe ser. Desde aquí se ha vendido fantásticamente la política del victimismo y han caído todos, desde Felipe González”, ha espetado Boadella. En este punto, su compañera de conversación ha recordado que “la Cataluña franquista ha existido” aunque, asegura, ahora se haya borrado esa historia.

"Complicidades" del PSC

Álvarez de Toledo ha arremetido contra las “complicidades” del PSOE, desde Felipe González, hasta Pedro Sánchez, cuya palabra “no vale nada”. Pero también contra el PSC, a los que acusa de ceder ante el discurso independentista. En este aspecto, ha hecho énfasis en el gobierno “cerrado y pequeño” de Pasqual Maragall y en Miquel Iceta, al que acusa de aceptar “criterios excluyentes e identitarios”.

Los ponentes tampoco han dejado pasar la figura del expresident de la Generalitat, Jordi Pujol. Mediante la lectura de un fragmento de La inmigración problema y esperanza de Cataluña en el que el exmandatario asevera la “miseria mental” de los andaluces, Álvarez de Toledo ha criticado la condición de “un hombre xenófobo, corrupto e inmoral” que ha sido ejemplo del “hombre de Estado”.

La figura del 155

Ya de vuelta a la actualidad, ambos han dado su opinión sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución que, según Boadella, “no arregló nada, sino que lo enredó todo”. “El Estado tiene que suspender la autonomía. Un 155 durante un tiempo largo produciría una situación paradójica para mucha gente: Los trenes seguirían funcionando a la misma hora, las carreteras, las industrias. Habría una acción didáctica de que el Estado no hace nada contrario a las necesidades de los catalanes”, ha afirmado con sorna mientras provocaba la risa de los asistentes.

Su compañera de charla ha dado un rodeo a la figura de la suspensión de la autonomía para dar la vuelta a las palabras de Boadella: “No es suspender, sino devolver la autonomía a los demócratas”. No obstante, Álvarez de Toledo ha instado a “no permitir ni una sola violación a la ley”, mientras que ha lamentado que hay una parte de Cataluña que “llena las instituciones de lazos y usa las televisiones para mofarse de la otra mitad”.

Vox, en campaña

A pesar del ambiente distendido, la candidata del PP no ha olvidado que se encuentran a las puertas de la campaña electoral y que el CIS ha augurado este martes un retroceso de los populares en Cataluña, que serían superados por Vox. Así, Álvarez de Toledo ha asegurado que la formación de Santiago Abascal no deja de ser el mismo nacionalismo que critican y los acusa de “asumir el fracaso del modelo del pacto del 78” en su discurso.

“No me parece justo cargarnos la Constitución, que es lo mejor que hemos hecho los españoles en nuestra historia, porque haya gente grosera y desleal”, ha sentenciado.