Miembros del Comité de Defensa de la República de Ponent (CDR Ponent) han realizado este fin de semana una representación para mofarse de la Guardia Civil delante del cuartel de Lleida.

Los activistas independentistas han formado dos grupos que se han disfrazado de guardias civiles, por una parte, y de ancianas con Fairy, por otra, y han mantenido una batalla en la que estas han vencido a los primeros.

Reedición de la estrategia del 1-O

El objetivo de la performance era reírse de una de las técnicas que, según diversos testigos del juicio del procés, utilizaron algunos manifestantes para enfrentarse a los policías nacionales y guardias civiles que cumplían la orden judicial de impedir el referéndum independentista del 1-O.

La estrategia de los secesionistas consistía en verter Fairy para que los agentes policiales resbalasen y cayesen al suelo al acceder a los colegios electorales.

Piolín

En la representación ante el cuartel de la Guardia Civil de Lleida, los que se hacían pasar por votantes del 1-O también llevaban lazos amarillos y un Piolín --nombre con el que los independentistas se referían de forma despectiva a guardias civiles y policías nacionales--.

Finalmente, los activistas disfrazados de agentes de la Guardia Civil huían despavoridos del lugar, todo ello ante la mirada de varios mossos d’esquadra reales.