La Junta Electoral pide un segundo informe sobre simbología 'indepe' en edificios del Govern

La Junta Electoral Central (JEC) ha pedido un nuevo informe sobre los símbolos de cariz "partidista" en los edificios de la Generalitat de Cataluña. Se refiere con este adjetivo a los múltiples lazos amarillos y banderas independentistas que se encuentan en las instancias públicas y que contravienen lo estipulado en la Ley Electoral. El nuevo texto que debe redactar la Delegación del Gobierno en Cataluña reflejará el grado de cumplimiento por parte del Govern de la orden de retirada de estos símbolos.

El estamento representativo del Gobierno en el territorio deberá enviar este segundo informe antes de las 16.00 horas. En él deberá constar, además del repliegue de simbología secesionista, si esta ha sido sustituida por otros elementos y de qué tipo, como ha ocurrido en la fachada del Palau de la Generalitat. 

Tomará una decisión hoy

La JEC necesita conocer el grado de cumplimiento de la indicación que dirigió hacia el Govern antes de la reunión planificada para esta tarde. En ella se tomará una decisión de actuación ante la negativa de Quim Torra de eliminar tales insignias. El president se ha escudado en la "libertad de expresión" para defender su postura. 

El primer aviso que envió la Junta Electoral fue hace 10 días. Entonces brindó un margen de 48 horas para que el Govern llevara a cabo la retirada de lazos, esteladas y pancartas por los políticos en prisión preventiva por la causa del 1-O. Dos días en los que Torra y su equipo no aprovecharon ya que no llevaron a cabo ningún cambio. El pasado martes la JEC dio un ultimátum de 24 horas más, en los que empezaron a verse los primeros movimientos. El primero, en la consejería de Empresa y Conocimiento, liderada por Àngels Chacón.

De la multa a la inhabilitación

Sin embargo, antes de este ultimátum aún había varias instituciones gubernamentales con simbología independentista: ocho consejerías y la propia sede del Govern. Algunas de ellas, ya con la reunión de la JEC en ciernes, han decidido durante el día de hoy cambiar los lazos amarillos de sus fachadas y ventanas por otros. Una de ellas ha sido el propio Palau de la Generalitat, que ha puesto una pancarta con un lazo blanco atravesado por una franja roja. El mismo símbolo luce, desde hace unas horas, la consejería de Interior, y la de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación ha decorado su entrada con diversos vinilos de color amarillo. Eso sí, todos ellos junto a lemas por la libertad de los políticos en prisión. 

Varias personas cambian la pancarta del Palau de la Generalitat / EUROPA PRESS

Si la Junta electoral considera que Quim Torra y su equipo no han cumplido con sus requerimientos, pueden abrir un procedimiento administrativo contra el Govern. Este procedimiento puede desembocar en una multa económica, que puede variar entre los 300 y los 3.000 euros, e incluso en una investigación judicial si el caso se remite a la Fiscalía al apreciarse un delito de desobediencia.