El director de TV3 reprobado por el Parlament, Vicent Sanchis, ha asegurado ante el juez que "no hubo desobediencia" por haber emitido los anuncios institucionales del referéndum ilegal del 1-O a pesar de las suspensiones del Tribunal Constitucional. El periodista responsable de la televisión pública catalana se ha basado "en su experiencia" para negar que cometiera tal delito.
La línea de defensa del director de Catalunya Ràdio, Saül Gordillo, es bien distinta. El responsable de la radio autonómica culpa al responsable de publicidad por haber emitido los anuncios por el medio público. De hecho, el abogado de Gordillo, Carles Monguilod, ha explicado tras la declaración de su cliente que la publicidad queda fuera de la sus competencias como director. Es más, ha justificado que en el organigrama de la empresa "aparece otro director de otro departamento" que sería el competente.
Apoyo 'indepe'
Como público se ha desplazado el diputado de Junts per Catalunya, Josep Costa, en señal de apoyo a los dos periodistas procesados por la emisión de estos anuncios que llamaban a la votación. Gordillo ha sido el primero en llegar a la radio pública; al poco tiempo lo ha hecho Sanchis acompañado de la presidenta en funciones de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA), Núria Llorach.
En el juicio también ha declarado la directora de la Autoritat Catalana de Protecció de Dades (APDCAT), Maria Àngels Barbarà. Está investigada por "la posible comisión de un delito de desobediencia al no ejercer las funciones inherentes a su cargo" puesto que distintas personas denunciaron un uso indebido de sus datos personales.