La partidos de la oposición del Ayuntamiento de Barcelona han reprochado al gobierno de Ada Colau su política presupuestaria, que actualmente se encuentra con los presupuestos del año pasado prorrogados. Todas las formaciones han lamentado que el gobierno municipal supedite sus cuentas a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), una estrategia que el equipo de la alcaldesa lleva aplicando desde hace meses.
Este martes el primer teniente de alcalde de Barcelona y responsable del área de economía, Gerardo Pisarello, se ha comprometido a rehacer el presupuesto municipal después de que el Gobierno de Pedro Sánchez presentara su propuesta de Presupuestos. El edil ha asegurado que volverán a abrir una negociación con los grupos de la oposición para aprobarlos.
Dependencia del Estado
En su comparecencia este martes en la comisión de Economía y Hacienda de Barcelona a petición del PSC, Pisarello ha recordado que el 40% de los ingresos del consistorio dependen de las transferencias del Estado, y que el resto depende de la política impositiva.
"Estamos haciendo los cálculos. Estamos analizando los PGE para rehacer nuestra propuesta y llevarla a los grupos"; ha expresado, y ha admitido que, a pesar de que hay puntos de los PGE positivos, como el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), también hay otras que no les gustan o que no se han incluido.
Las explicaciones de Pisarello no han convencido a la oposición, que ha cargado duramente contra la gestión económica de los comunes. Todos han coincidido a la hora de lamentar que el gobierno municipal supedite las cuentas de Barcelona al gobierno central. Uno de ellos ha sido el PDeCAT: "No solo han paralizado la ciudad, sino que vuelven a poner a Barcelona arrodillada al dinero que les del papá Estado", ha afirmado Sònia Recasens, que ha añadido que la capital catalana tiene fuerza suficiente para ser autónoma.
Suavidad de ERC
La presidenta del grupo municipal de Cs, Carina Mejías, ha lamentado la "dependencia absoluta" del Ayuntamiento respecto al Gobierno español, y ha subrayado la falta de transparencia del estado real de las cuentas municipales y su gestión. “Barcelona no tiene un salud económica de hierro, las cuentas no están cuadradas y no sabemos si habrá presupuesto”, ha asegurado la líder de Ciudadanos.
Desde ERC las críticas contra el equipo de Colau han sido más ligeras. La edil republicana Gemma Sendra ha aconsejado que "debemos hacer presupuestos reales con lo que tenemos hoy", y ha tendido la mano para debatir y hacer unos presupuestos reales que prioricen los objetivos más importantes de la ciudad y que no queden supeditados al Gobierno central.
PSC: "Habrán nuevos recortes"
Más duro ha sido el PSC, muy beligerante en lo que concierne a la gestión económica del Ayuntamiento. La concejal Montserrat Ballarín ha afeado a Pisarello su "demagogia y capacidad para lanzar pelotas fuera", y ha insistido en que Barcelona tiene autonomía financiera suficiente como para no estar subordinada a otros gobiernos. Por ello, ha asegurado que la prórroga de las cuentas municipales se debe a la incapacidad de Colau para alcanzar consensos.
"Se ha cargado la autonomía financiera de Barcelona. Ha supeditado estos Presupuestos a los del Estado", y ha reclamado que no haya color político en las inversiones y que sean transversales, además de proponer recurrir a la modificación de crédito para realizar las inversiones necesarias. Asimismo, Ballarín ha alertado que el decreto de prórroga de los presupuestos significará una reducción de 118 millones de euros en el gasto de 2019 respecto a 2018: "Queremos saber qué consecuencias tendrá esta prórroga de los presupuestos. Porque estos 118 millones de euros menos en 2019 sólo tienen una lectura: que habrán nuevos recortes". En este contexto, ha avisado que la prórroga de los presupuestos obligará a hacer recortes en inversiones previstas.
La concejal de la CUP Eulàlia Reguant ha recordado que hay necesidades de los vecinos por cubrir: "Pasa el tiempo y seguimos igual", mientras que el concejal no adscrito Joan Josep Puigcorbé ha lamentado que el Ayuntamiento esté pendiente de los PGE para elaborar los Presupuestos de la ciudad.
Presupuesto expansivo
La misma comisión ha aprobado una proposición del PDeCAT que insta al Gobierno municipal a presentar a aprobación inicial un Presupuesto municipal expansivo y de progreso para 2019 e iniciar un proceso de participación ciudadano y de partidos sobre las cuentas. La iniciativa ha contado con el apoyo de PDeCAT, Cs, ERC, PSC y PP.
Asimismo, los grupos han tumbado una proposición del PP que instaba a presentar una modificación de crédito del Presupuesto prorrogado para dotar nuevas inversiones municipales de 2019, con un importe mínimo de 87,1 millones de euros, para su aprobación inicial en la siguiente comisión de Economía y Hacienda.