Carles Puigdemont se dedica ahora a atacar a medios de comunicación no independentistas desde su mansión de Waterloo. El expresidente de la Generalitat ha reaccionado de forma airada y con insultos contra alguno de ellos después de que la justicia haya archivado las denuncias inciadas contra los Mossos por presunto espionaje.
El líder postconvergente ha dado pie a una campaña contra la prensa no afín a sus intereses en las redes sociales apuntando directamente contra el diario El Periódico de Catalunya. Y lo hace criticando, en términos ofensivos, su portada del pasado 22 de enero de 2018, en la que se denunciaba que la policía catalana había intentado "destruir la alerta de EEUU" sobre los atentados del 17-A en Barcelona en una incineradora.
"Miserables"
"Los miserables lo serán para siempre. Ellos, sus editores, sus financiadores, los amigos del rey... todo se sabrá. Paciencia. Tenemos tiempo: en las prisiones y en el exilio nos acordamos cada día de todos los miserables", afirma Puigdemont en su perfil de Twitter acompañando su escrito con una fotografía de dicha portada. En concreto, de una captura difundida por el editor del digital independentista Vilaweb, Vicent Partal.
La denuncia del líder de la Crida per la República ha dado pie a una furibunda campaña de descalificaciones, tanto de personas de su entorno, como de otros internautas nacionalistas, en las redes sociales.
"Escoria periodística"
En la misma línea, el exdiputado de Junts Per Catalunya Germà Bel, muy próximo a la Crida, se refiere a la portada de El Periódico en estos términos: "La dimensión de la escoria periodística se mide perfectamente por la diferencia entre el espacio y la interpretación otorgado el 22 de enero de 2018 al asunto 'documentación de los Mossos', y al espacio dado hoy al archivo de la causa. Caso de estudio: 'The Nota'".
El político nacionalista adjunta a su comentario la imagen de la primera página de dicho diario en su edición de hoy, reproducida por su director, y en la que el archivo de la causa de los Mossos no aparece.
"Que pidan perdón"
El expresidente de la Generalitat huido de la justicia también se hace eco en sus redes sociales de la reacción que tuvo ayer el exconsejero de Interior de la Generalitat, Joaquim Forn, al conocer la "excelente noticia" del archivo de las denuncias contra la policía catalana en Lledoners, donde cumple prisión preventiva por el 1-O: "Nada de espionaje o finalidades políticas, sólo actuación por criterios policiales. Ahora tocaría que los políticos y medios que durante más de un año se han ensañado contra la policía catalana pidieran perdón", sostiene.
Los ataques de Puigdemont no se centraron en un único diario, dado que en uno de sus retuits también reprodujo capturas de pantalla de otros medios digitales difundidas en redes por independentistas afines. "¿Alguien pedirá perdón por tanta difamación, tanto daño causado, tantos inventos, tanta fobia, tanto odio?", se pregunta uno de ellos.
"Denuncias e informaciones falsas"
Este último mensaje fue reproducido también por el actual presidente de la Generalitat, Quim Torra, que en su perfil de Twitter reprodujo además un tuit de los Mossos en el que se aplaude el archivo de las querellas por presunto espionaje a políticos, periodistas, abogados y otras personalidades no independentistas hablando de ellas como "17 denuncias e informaciones falsas contra nosotros",
Puigdemont, Torra y los líderes independentistas, siempre críticos con la justicia española, celebran ahora la resolución del juzgado número 22 de Barcelona, que descarta el supuesto caso de espionaje al entender que la comisaría de información de los Mossos actuó con "competencia", recabando datos de personas que por su significación sociopolítica podían ser partícipes o víctimas de incidentes en un momento "especialmente vulnerable", en pleno procés independentista. La resolución del juez puede ser recurrida.