“Más que un consejero de Interior, Miquel Buch parece un consejero de los CDR”, asegura el Sindicato de Policías de Catalunya (SPC) en un comunicado en el que pide su dimisión. “A este hombre le importa más lo que piensen estos colectivos que no lo que pensamos los mossos y la integridad física de los agentes que trabajamos bajo sus órdenes, no es la primera vez que hace declaraciones que ponen en duda la profesionalidad del cuerpo de Mossos”, añaden.
“¡Ya basta!”, afirma el Sindicato de Mossos d’Esquadra (SME) en relación a la depuración. “Un consejero de Interior plenamente desaparecido el mismo día de los hechos”, explican en una nota, en la que critican la “falta de consideración previa y falta de apoyo a los agentes de la BRIMO, ARRO, USC y todos aquellos a quien en tan complicados acontecimientos, hacen frente a los mismos de la mejor manera profesional posible. Que lo hacen con la escasez de recursos de todo tipo al que nos ha llevado su propio departamento. SME acusa a Buch de “falta de neutralidad y transparencia” por asegurar que “no me temblará el pulso para echar a los agentes de la BRIMO”.
Desde SAP-FEPOL también se pide la dimisión de Buch. “Estamos cansados de ver cómo se cuestiona cada una de las actuaciones de nuestros compañeros. Siempre hemos pedido la despolitización del cuerpo de Mossos d’Esquadra y exigimos no ser instrumentalizados con finalidades políticas”. Aseguran que el consejero “ha traspasado todos los límites. Será tristemente recordado como el consejero que más ha menospreciado al cuerpo de Mossos”.
Llueve sobre mojado
Es el enésimo episodio de politización dentro del cuerpo de Mossos d’Esquadra. La legislatura comenzó mal, con la elección del activista independentista Miquel Buch como consejero de Interior. No fue una buena noticia para los agentes de la Policía Autonómica, hartos de que se les utilice de forma partidista. Ahora ha sido el propio Buch quien ha decidido plegarse a las órdenes del presidente Quim Torra, quien exige una purga en la cúpula de los Mossos por las cargas registradas ayer, día de la Constitución, en Girona y Terrassa.
De esta forma, Torra ha provocado una crisis de gobierno al servicio de los Comités de Defensa de la República (CDR) y de la CUP, muy críticos con la intervención policial llevada a cabo para impedir que los antifascistas agredieran a manifestantes a favor de la Constitución. En lugar de salir en defensa de los mandos de Mossos, Buch agacha la cabeza ante el presidente catalán.
La depuración está prevista para el martes, durante la reunión semanal del consell executiu. Y en vísperas de una gran movilización de asociaciones y sindicatos para defender sus derechos laborales.
"Sacrificio personal"
“Los mossos han demostrado ser profesionales de primer orden, haciendo un sacrificio personal permanente que va más allá del deber profesional y yendo a trabajar son estar en las mejores condiciones físicas conocedores que con la falta de efectivos todo el mundo es necesario para dar cobertura a los compañeros. Un sacrificio que ha comportado un desgaste que ya es hora que sea recompensando con el retorno de todo lo expoliado”, aseguran en un comunicado conjunto, a modo de descripción de la situación en la que se encuentran los agentes y que ha dado lugar ya a varias movilizaciones contra el departamento. El próximo día 12, miércoles, los Mossos volverán a salir a la calle.
Por el contrario, Mossos per la República califica de "buena noticia" la depuración dentro del cuerpo "Es necesario llevar a cabo las acciones pertinentes para recuperar la credibilidad y la buena imagen del cuerpo. Y hay que señalar y depurar responsabilidades sobre actuaciones desproporcionadas que no se ajustan a ningún protocolo y a actitudes determinades", afirman en las redes sociales.