El candidato a la alcaldía de Barcelona y exprimer ministro francés, Manuel Valls, ha lamentado el resultado obtenido por Vox en las elecciones autonómicas de Andalucía porque supone el surgimiento de un "populismo de extrema derecha", y ha defendido una alianza entre los partidos constitucionalistas.
En la clausura del seminario Grandes desafíos de Iberoamérica, organizado en Madrid por la Fundación Internacional para la Libertad, Valls ha indicado que "hay que mantener la cabeza muy fría" tras la irrupción de Vox en el parlamento andaluz. "El populismo de extrema derecha ha emergido y no es una buena noticia", ha concluido Valls, añadiendo que ahora hay "dos extremos" en España.
Diferencia con Ciudadanos
El exprimer ministro francés, que cuenta con el apoyo de Ciudadanos en su candidatura para Barcelona, no ha dudado en utilizar el término "extrema derecha" para definir a Vox, un calificativo que Albert Rivera ha evitado utilizar en diversas ocasiones. El líder de la formación naranja dio evasivas y eludió contestar en una entrevista en la Cadena Ser a la pregunta sobre el espectro ideológico en el que situaría a la formación de Santiago Abascal.
Preguntado por la misma cuestión, el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, también eludió calificar a Vox como extrema derecha. En una rueda de prensa, afirmó que Ciudadanos “respeta profundamente” otras ofertas políticas y no se dedica a “etiquetarlas”.
Critica el entusiasmo del PP
También se ha referido, sin nombrarlo, al PP y a su presidente, Pablo Casado, que tras conocerse los resultados de las elecciones andaluzas defendió que su partido debía gobernar por la ratificación de su proyecto frente al "fracaso histórico" del PSOE de Pedro Sánchez.
Valls, que se ha mostrado sorprendido por el "entusiasmo" de una formación que "ha perdido votos y escaños", ha indicado que "se ha acabado el bipartidismo". Por ello, aboga por la suma de partidos --sin mencionar cuáles-- para llegar a acuerdos en diferentes cuestiones como la inmigración, el cambio climático y otras reformas.
"Pactos inteligentes"
Según el exprimer ministro francés, es necesario "buscar la estabilidad con los grandes partidos constitucionalistas, ya sea en Madrid, en Andalucía o en Barcelona". En este sentido, ha reclamado "una gran alianza entre lo que fue la socialdemocracia y lo que es el liberalismo político, no solo para contener el populismo, sino para crear ilusión y optimismo".
"Es el momento de actuar a partir de convicción democrática y en el marco de las convenciones propias de la democracia y de nuestros valores", que son "la libertad, la igualdad, el respeto a las personas, la tolerancia", ha manifestado.
Tras recordar a los políticos en Andalucía que ahora los electores esperan que decidan con "responsabilidad", ha señalado que en España los pactos "tendrán que ser inteligentes, hacerse pensando en el respeto a las personas y las opiniones, con moderación y con sentido común".
Victoria de Ciudadanos
Valls ha afirmado que es hora de "recuperar el centro político" y ha expresado su satisfacción por el resultado electoral logrado en Andalucía por Ciudadanos, que ha duplicado el porcentaje de voto obtenido en 2015 y ha pasado de 9 a 21 diputados, situándose como tercera fuerza política. "Es el momento de la responsabilidad. Esta responsabilidad es la que esperan los electores de sus políticos. Es el gran momento de recuperar el centro político, y por eso me alegro de los resultados de Ciudadanos", ha resaltado.
El exprimer ministro ha recordado que en Francia luchó contra "los populistas de extrema derecha y de extrema izquierda", que "van buscando siempre lo mismo, un enemigo", que puede ser "el musulmán, el judío, el refugiado, las élites, las empresas, Bruselas o Madrid".
Defensa del liberalismo
Asimismo, ha rechazado la idea de la democracia directa que defienden algunos de esos partidos. "Yo creo en la democracia liberal y representativa", ha aseverado.
Precisamente, Valls atribuye el auge del populismo en España y en el mundo en general a que "el pueblo está cabreado" y "no puede más" con las consecuencias de la crisis económica, la corrupción o el crimen organizado. Frente a eso, considera que "el liberalismo político y social es una de las respuestas".