La Junta de Gobierno del Ilustre Colegio de Procuradores de los Tribunales de Barcelona ha emitido un comunicado en el que condena rotundamente el ataque cometido por Arran, las juventudes de la CUP, en el domicilio del magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena. Los antisistema lanzaron pintura amarilla --color que simboliza el apoyo a los independentistas presos-- en la puerta de la casa del juez instructor del procés en Sant Cugat del Vallès (Barcelona).
"Como juristas que diariamente representan los ciudadanos a los tribunales", explica en su comunicado, el Colegio "quiere mostrar su más firme rechazo" al ataque cometido contra la vivienda de los magistrados Pablo Llarena y Gema Espinosa. "Estas lamentables conductas no representan en absoluto a ningún sector de la sociedad catalana, sean cuales sean sus ideas políticas. Uno de los valores esenciales de cualquier sociedad moderna y avanzada de siglo XXI es el respeto a nuestras leyes democráticamente aprobadas y, en consecuencia, también a aquellos servidores públicos encargados de administrar justicia ejerciendo la potestad jurisdiccional, se compartan o no el sentido de sus resoluciones".
Arran ataca la casa del juez Llarena con pintura amarilla
"Nuestra sociedad plural, donde caben pensamientos muy diferentes --añade-- no puede permanecer en silencio ni consentir actos como los recientemente producidos ante la casa de los dos magistrados, que pretenden intimidar precisamente aquellos de deben velar por el cumplimiento de nuestras leyes en la difícil tarea de impartir justicia. Así, pues, expresamos nuestro más firme apoyo a todos aquellos jueces y magistrados que desarrollan su labor ante los juzgados y tribunales de Cataluña, confiando en que conductas como las que se han producido no vuelvan a repetirse.
Ciudadanos ha presentado una denuncia en la Fiscalía contra los autores del atentado, a los que acusa de un delito de odio.