Joan Tardà no descarta volver a "levantar la bandera de la desobediencia" y que nuevos líderes políticos entren en prisión. El diputado de ERC en el Congreso ha vaticinado este domingo que en Cataluña se volverá a votar en un referéndum, y ha defendido hacerlo "a la catalana". Es decir, según sus propias palabras, "de forma cívica y pacífica".
"Es posible que tengamos que volver a desobedecer. Es posible que nuevos dirigentes, hombres y mujeres republicanos, vayan a la prisión. Pero haremos lo posible para que esto no pase", ha manifestado Tardà durante su discurso en el acto Municipis republicans, ciutats de progrés celebrado en Lleida.
"Será inevitable volver a votar"
El dirigente republicano ha instado al movimiento independentista "a mantenerse firme" y a poner "más cerebro que estómago". En su opinión, el 1-O fue un ejemplo de "desobediencia institucional y popular". Y se ha mostrado convencido de que será "inevitable" volver a votar sobre la independencia, a pesar de que las leyes no lo permiten.
Asimismo, ha pronosticado "problemas" porque algunos partidos políticos "están empeñados en transformar el proceso pacífico, cívico y democrático en un problema de orden público". "Nos acusan de golpistas aquellos que nunca, nunca, nunca han renegado del franquismo", ha denunciado.
"Que quepa todo el mundo"
En su opinión, el soberanismo "ha llegado muy lejos en muy poco tiempo". Y ha hecho un llamamiento a ampliar la base social para alcanzar la mayoría: "No sabemos cómo será el camino, pero debe ser muy ancho para que quepa todo el mundo", ha declarado.
Tardà, asimismo, ha pedido "unidad de acción con los otros independentistas y con todas las personas de bien que quieren una Cataluña de progreso y socialmente justa".
"España será la víctima"
En acto ha intervenido también la portavoz de ERC, Marta Vilalta, que ha acusado a Ciudadanos de "ir muy de la mano de Vox" y de "intentar desacreditar las instituciones catalanes".
Por su parte, la diputada en el Parlament Jenn Díaz ha leído una carta del ex consejero de Exteriores, Raül Romeva, encarcelado en la prisión de Lledoners. Y ha considerado que, "a largo plazo", la principal "víctima" de la causa del 1-O será España, a la que "le pesará está decisión política por encima de la democracia y las libertades" y "la acabará pagando".