Los dirigentes de la Generalitat preparan mecanismos por si algún día se vuelve a aplicar el artículo 155 de la Constitución en Cataluña. Esa es la finalidad que se esconde tras el denominado Consejo de la República, que echará a andar el próximo martes 30 de octubre. La creación de este organismo tiene entre sus objetivos secretos erigirse en una especie de Govern paralelo en caso de se suspendiera la autonomía catalana tras una nueva declaración de independencia.
El Consejo de la República se convertiría en "una estructura de Estado que puede dar mucho juego", ya que en determinado momento "puede asumir el liderazgo de la secesión”, según publica El Confidencial citando a "fuentes independentistas", e
Clave en la desconexión
Así, este organismo se convertiría en una de las claves de la desconexión, con el que los dirigentes independentistas intentarían burlar el control de la Generalitat por parte del Estado. Algo que no pudieron hacer cuando se aplicó el 155 tras la declaración unilateral de independencia (DUI) del 27 de octubre del año pasado. En definitiva, su intención, llegado ese caso, sería convertirse en el "Gobierno legítimo" de Cataluña.
Según esas fuentes soberanistas, el Consejo de la República no podría "ser suprimido por el 155, porque no es un órgano oficial de la Administración". Así, "aunque la Generalitat sea intervenida, se canalizarán las órdenes y los designios de la mayoría independentista" a través de ese Consejo.
Parlament paralelo
Con ello, los independentistas tendrían ya su principal "estructura de Estado", que les permitiría controlar un poder ejecutivo ficticio. Al mismo tiempo, contemplan la creación de una Asamblea de Cargos Electos, que agruparía a todos los diputados autonómicos, nacionales, eurodiputados y concejales sólo de las listas independentistas. Este otro organismo ejercería como Parlament paralelo, al margen de las instituciones legales y democráticas.
De este modo, una de las pocas estructuras paralelas que les quedarían por construir es un banco central catalán, una posibilidad prácticamente inviable.