Unos 4.000 Mossos d'Esquadra se han manifiestado esta tarde por las calles del centro de Barcelona para reclamar la mejora de sus condiciones laborales, y también respeto a su trabajo por parte de las administraciones.

Bajo el lema "Por la dignidad y la seguridad de todos", que podía leerse en la pancarta de la cabecera de la manifestación, cientos de miembros de la policía catalana han iniciado su recorrido minutos antes de las siete de la tarde.

Protesta laboral

La manifestación finalizará en la plaza de Sant Jaume de Barcelona, frente a las sedes tanto del ayuntamiento como de la Generalitat de Cataluña. A su paso por las Ramblas, se ha guardado un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados del 17-A.

Los organizadores de la protesta han subrayado que su reivindicación es de carácter laboral. Y niegan cualquier tipo de vinculación política.

Incidentes del 1-O

Los participantes en la manifestación, convocada por el sindicato de funcionarios CSIF y el colectivo MosSOS, llevaban camisetas negras y algunos, un ataúd con reivindicaciones laborales escritas sobre él.

La manifestación tiene lugar después de los incidentes vividos esta semana a raíz de la conmemoración del primer aniversario del 1-O, con enfrentamientos entre grupos de radicales y los agentes tanto ante el Parlament como frente a la prefactura de Policía en la Via Laietana. Un dispositivo que ha generado fuertes críticas por parte de diversos sindicatos y organizaciones policiales por su escasez de efectivos y una falta de previsión reconocida incluso por su director general.

Piden a Interior que condene la violencia

En nombre de la plataforma convocante, David Miquel ha asegurado a la prensa que están esperando "una condena por parte del Departamento de Interior a la violencia" del pasado lunes, una respuesta que debería haber llegado "desde el minuto uno".

Miquel también ha criticado el dispositivo desplegado, y que no todos los agentes tuvieran los elementos de seguridad necesarios para proteger el Parlament. "Esperamos que modifiquen su manera de tratar a los agentes", ha manifestado.

Sobre el hecho de que la Generalitat no invitara esta semana a ningún miembro del Estado a la inauguración del curso en la academia de formación de los Mossos, Miquel lo ha lamentado "porque no ayuda a establecer puentes entre administraciones".